El detenido, identificado como F.H.A., de 60 años, fue arrestado el miércoles y tras prestar declaración ante la Guardia Civil, pasó el jueves a disposición del juzgado de instrucción número 7 de la capital grancanaria. A principios de semana, la Guardia Civil informó de que el Seprona había encontrado bidones que contienen residuos tóxicos y peligrosos enterrados en una cantera del barrio de San Lorenzo, en la capital grancanaria, en el marco de una investigación dirigida por el juzgado de instrucción número siete de la ciudad.
Según la Guardia Civil, el presidente del Consejo de Administración de la cantera es el “único responsable de estas prácticas ilegales” consistentes en el enterramiento en la explotación minera “de una serie de residuos tóxicos y peligrosos”. Las excavaciones en la cantera se llevaron a cabo “ante la sospecha de que en la misma se han venido enterrando, de forma periódica” los residuos para evitar ser sometidos a los procesos que requiere su reciclado.
Así se descubrió en distintos puntos de la cantera “un considerable número de bidones”, algunos de los cuales mantenían su contenido “en perfecto estado”, aunque resultan muy perjudiciales para el medio ambiente al tratarse de alquitrán líquido y viscoso, aceites y betún. Otros bidones, en cambio, habían perdido “prácticamente su contenido”, según la Guardia Civil, debido a que ya habían transcurrido varios años desde su enterramiento.
Según el instituto armado, los residuos no sólo tenían su origen en las actividades generadas en la propia cantera, sino que se sospecha que otras empresas industriales utilizaban “periódicamente” esta cantera como lugar para desprenderse de los productos tóxicos y peligrosos sin realizar el oportuno tratamiento y reciclado“. Durante la investigación, el Seprona ha contado con la ayuda de personal de control analítico de fuentes medioambientales, dependiente de la Fundación Universitaria y la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, así como de la Agencia de Protección del Medio Urbano y Natural.