La Guardia Civil y la Policía Nacional, en el transcurso de la operación Luna Nueva llevada a cabo en Fuerteventura y Lanzarote, han detenido a 18 personas (seis españoles, 11 marroquíes y un congoleño) integrantes de una red que se dedicaba al tráfico de seres humanos y drogas. Los agentes han intervenido más de 410 kilos de hachís, un kilo de metanfetamina y 300 gramos de cocaína. Además, se ha desmantelado en Arrecife de Lanzarote un laboratorio donde se adulteraba y cortaba la cocaína.
Las investigaciones se iniciaron tras tener conocimiento de la actividad delictiva que estaba llevando a cabo una organización criminal asentada en esas islas. Tras establecer un dispositivo de vigilancia y control, en una primera fase se logró identificar a todos los miembros de la organización, los lugares de residencia y ocio, los vehículos que utilizaban para realizar los transportes de la droga y el modus operandi utilizado.
Se comprobó que trasladaban el hachís y la cocaína por vía aérea desde Sudamérica en equipajes. Además, introducían por las costas de Lanzarote a inmigrantes ilegales procedentes de Marruecos, los que, aprovechando el viaje en narcopateras, trasladaban partidas de hachís.
En una primera fase de explotación de la operación, se intervinieron cerca de 280 kilos de hachís en dos vehículos estacionados en los muelles de Corralejo y Puerto del Rosario y en el interior de un taxi que se hallaba en las proximidades, momento en que fueron detenidos varios de los miembros del grupo.
Ya en julio, el grupo pretendía realizar un viaje desde las costas de Marruecos hasta Lanzarote en el que trasladarían inmigrantes ilegales y una partida de hachís. La Guardia Civil y la Policía Nacional establecieron un dispositivo conjunto para interceptar la embarcación.
Cuando la embarcación tipo patera arribó a la zona del Faro de Pechiguera, en el municipio de Yaiza, sus nueve ocupantes fueron detenidos con otros 120 kilogramos de hachís.
Con la finalidad de pasar desapercibidos ante las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, la organización se valía de uno de sus miembros, de profesión taxista, que utilizando su vehículo trasladaba la droga y a los narcotraficantes como si se tratara de pasajeros que utilizaban este servicio.
Las investigación, dirigida por el Juzgado de Instrucción 1 de Telde, en Gran Canaria, ha sido llevada a cabo por agentes especialistas en la lucha contra el Crimen Organizado de la Comandancia de la Guardia Civil de las Palmas y agentes de la Comisaría de la Policía Nacional de Arrecife.