La Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico y Cultural del Cabildo de Gran Canaria, a través de la Dirección General de Patrimonio Histórico, realiza trabajos de excavación arqueológica en el lugar conocido como Finca Clavijo, en el municipio de Santa María de Guía, al norte de la isla, después de que unas labores de acondicionamiento agrícola dejaran al descubierto restos humanos que, como se ha comprobado tras las primeras catas, forman parte de un conjunto cementerial organizado perteneciente a los primeros años de colonización de las Islas.
Hasta el momento se han localizado siete fosas donde ha aparecido “una muestra dispar de la población”, ya que se han encontrado “restos de individuos adultos de ambos sexos y niños” y no se descarta que el espacio de inhumaciones sea aún mayor, según explica el arqueólogo del Cabildo Javier Velasco, a través de un comunicado.
De forma casual
El hallazgo se produjo de manera casual mientras se instalaban canalizaciones destinadas al riego agrícola y la empresa encargada de estos trabajos avisó de inmediato a la Guardia Civil que, a su vez, alertó al servicio de Patrimonio Histórico del Cabildo, que ha asumido el coste total de la excavación por un importe inicial de 15.000 euros. La empresa encargada de realizar estas labores de recuperación de los hallazgos es Tibicena Patrimonio y Arqueología.
Junto a la alta representatividad de los restos el Cabildo reseña la aparición de una medalla de temática religiosa y una moneda junto a uno de los restos que permiten fechar esta inhumación en las primeras décadas del siglo XVI, lo que sitúa este enterramiento en los primeros momentos de colonización efectiva de la isla por los europeos tras la conquista.
“Estamos ante un cementerio singular que no responde a los patrones habituales que tienen este tipo de espacios tras la incorporación de Gran Canaria a la Corona de Castilla”, comenta el arqueólogo.
Velasco añade que la zona, próxima al casco histórico de Gáldar, sufrió una intensa ocupación prehispánica, hecho que se pone de manifiesto con la aparición de abundantes fragmentos de cerámica y piezas de obsidiana en las tierras utilizadas para los sucesivos rellenos agrícolas que se han practicado desde la colonización.
Adelantó que tras la recuperación de los restos se hará un amplio estudio para determinar el rango cronológico del recinto (mediante la datación a través del Carbono 14), así como pruebas bioantropológicas que ayuden a conocer datos como el sexo, la edad, las huellas del trabajo físico, alimentación o las enfermedades que padecieron estos hombres y mujeres durante sus vidas.
También se acometerá un intenso rastreo de la documentación generada durante los primeros años de la colonización europea para determinar si hay constancia escrita del lugar. Todos estos estudios arrojarán luz sobre la vida cotidiana y las relaciones sociales en la isla durante la época de referencia.
Arqueología preventiva
Javier Velasco indicó que este tipo de intervenciones pone de manifiesto la importancia de contar con instrumentos como la Carta de Riesgo Arqueológico que no sólo facilitan el trabajo a las instituciones y empresas que acometen obras en lugares con alta potencialidad de albergar vestigios del pasado, sino que ayuda a poner en práctica la Arqueología Preventiva, que preconiza la actuación previa en los yacimientos para conservarlos y preservarlos antes de que cualquier tipo de alteración del medio provoque su destrucción.
En este sentido, destaca el técnico de la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico y Cultural del Cabildo de Gran Canaria, señaló el comportamiento responsable de la empresa Tragsa (responsable de los trabajos de acondicionamiento agrícola de la Finca Clavijo), que alertó del hallazgo de manera inmediata y ha posibilitado que los estudiosos puedan aportar más datos que ayuden a profundizar en el conocimiento de la historia de Gran Canaria.