La portada de mañana
Acceder
Peinado multiplica los frentes del ‘caso Begoña’ sin lograr avances significativos
El miedo “sobrenatural” a que el cáncer vuelva: “Sientes que no consigues atraparlo”
OPINIÓN | 'En el límite', por Antón Losada

El Rey Felipe VI conoce los nuevos Super Puma del SAR en Gran Canaria

Agencias

Las Palmas de Gran Canaria —

El Rey Felipe ha visitado este jueves la Base Aérea de Gando, en Gran Canaria, donde ha compartido un breve encuentro con los efectivos del Ala 46 del Ejército del Aire y se ha interesado por los nuevos helicópteros HD-21 adquiridos para el Servicio de Búsqueda y Rescate (SAR, en sus siglas en inglés).

Don Felipe ha regresado a esta Base del Ejército del Aire, que ya conocía de su etapa como Príncipe de Asturias (la visitó en 2004), para expresar su apoyo a las unidades que tienen encomendada la defensa aérea de Canarias (el escuadrón 462 de cazas) y también la atención a todo tipo de accidentes marítimos o aéreos que ocurran en esta zona del Atlántico Medio (el escuadrón 802-SAR).

Tras pasar revista a la formación que le rendía honores con uniforme de capitán general del Aire, el Rey ha mantenido una reunión a puerta cerrada con el general jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire, Javier Salto; el general jefe del Mando Aéreo de Canarias, Fernando de la Cruz; y los oficiales responsables de las diferentes unidades de la base, que le han explicado durante unos 35 minutos los detalles de las misiones que tienen asignadas.

Aunque de ese encuentro no ha trascendido oficialmente nada, en la Base Aérea de Gando la visita del monarca se ha recibido como un gesto de apoyo tras los malos momentos que han sufrido en los últimos años, por la pérdida de siete de los miembros del SAR en dos accidentes con helicópteros Superpuma (2014 y 2015).

En el primero de ellos, ocurrido el 20 de marzo de 2014, fallecieron el capitán Daniel Pena Valiño, la teniente Carmen Ortega Cortés, el teniente Sebastián Ruiz Galván y el sargento Carlos Caramanzana Álvarez, al estrellarse su helicóptero contra el mar mientras participaban en un ejercicio nocturno de coordinación con la Armada, en un punto situado entre Fuerteventura y Gran Canaria.

Un año más tarde, el 22 de octubre de 2015, el capitán José Morales Rodríguez, el teniente Saúl López Quesada y el sargento Jhoander Ojeda Alemán perdieron la vidal al estrellarse en el Atlántico, al norte de Mauritania, el Superpuma con el que regresaban a Gran Canaria de una misión en Senegal.

Los helicópteros involucrados en ambos accidentes están siendo ahora sustituidos por el Ejército del Aire por nuevas aeronaves de última fabricación, también de la familia Superpuma, los HD-21, dos de los cuales ya están en servicio en el SAR de Gran Canaria.

La visita de Don Felipe ha tenido como escenario el hangar principal de la base, donde le han mostrado las dos aeronaves de referencia del Ala 46: el caza F-18 y el helicóptero HD-21.

El Rey ha concentrado casi toda su atención en este último: ha escuchado las explicaciones de los mandos sobre sus características técnicas, ha conversado con una de sus tripulaciones (compuesta por dos pilotos, un enfermero, un mecánico-operador de grúa y dos rescatadores) e, incluso, se ha subido en uno de ellos.

Con formación como piloto de helicópteros recibida durante su instrucción militar, Don Felipe no ha podido evitar entrar en la cabina de la aeronave y sentarse por unos instantes a sus mandos, mientras le explicaban los avances que incluye el HD-21.

El SAR es una de las unidades del Ejército más apreciadas en Canarias, donde presta servicios desde hace medio siglo.

Su primer servicio humanitario en las islas lo prestó el 12 de diciembre de 1955, cuando un helicóptero del Ejército del Aire evacuó de El Hierro a Tenerife a un paciente en estado grave que había sufrido una perforación de estómago.

El último se remonta a este miércoles, cuando uno de los dos helicópteros HD-21 que ha conocido Don Felipe en Gando tuvo que desplazarse al sur de Fuerteventura para rescatar junto a otra aeronave de Salvamento Marítimo a 19 polizones africanos descubiertos en una gabarra al sur de Fuerteventura, en medio de muy malas condiciones de mar.

Al terminar su visita a la Base, Don Felipe se desplazó en helicóptero al Pico de las Nieves, en la cumbre de la isla, para conocer la Estación de Vigilancia Aérea EVA-21.

Después, tiene previsto acudir a Maspalomas a compartir un almuerzo con el sector turístico de Canarias en el marco del quinto Foro Internacional del Turismo.