El portavoz de la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Canarias ha negado en un escrito los malos tratos que denunció este jueves la ONG Human Rights Watch tras haber realizado una inspección el pasado 28 de marzo al centro de menores de Arinaga.
Por tanto relata que el 13 de Febrero de 2007 se recibió en la Fiscalía, vía fax, una comunicación de la citada ONG en la que se ponían en conocimiento supuestos malos tratos, vejaciones o abusos físicos o sexuales perpetrados contra menores en las instalaciones del Centro denominado Dispositivo de Emergencia de Menores Extranjeros No Acompañados (DEAMENAC) ubicado en la localidad de Arinaga, Gran Canaria.
Al mes siguiente se recibió en esta Fiscalía un escrito remitido por la Dirección General de Protección del Menor y de la Familia (DGPMF) del Gobierno de Canarias en el que se ponía de manifiesto el contenido de idéntica comunicación remitida vía fax por la citada ONG ante el mencionado organismo
Según la propia DGPMF, tras haber requerido a la ONG para que se ampliaran los términos de esa comunicación, y ante la falta de respuesta en tal sentido, se optó por poner los hechos en conocimiento de esta Fiscalía.
La comunicación de la organización Human Rights Watch era “extraordinariamente vaga, imprecisa e inconcreta, tanto en lo referente a los propios hechos, como en lo relativo a las personas implicadas, a pesar de lo cual se decidió iniciar una investigación preliminar encaminada a verificar, aunque fuera indiciariamente, los hechos expuestos, debido a su aparente gravedad”, explica.
Visita de inspecion por parte de la Fiscalía
A finales de marzo las Fiscales encargadas de los Servicios de Extranjería y Menores de esta Fiscalía se realizó una visita de inspección al referido centro.
El resultado de la citada inspección fue documentado por medio de informe exhaustivo de la misma fecha. En la citada visita de inspección se mantuvo entrevista reservada con varios menores. No hubo necesidad de utilizar los servicios de intérprete alguno, debido a los conocimientos de inglés y francés de la Fiscal de Extranjería, además de que varios de los menores hablaban el idioma español. En consecuencia, no hubo ningún problema de comunicación.
Como conclusión de la citada inspección se puede afirmar que no existe manifestación alguna por parte de ningún menor sobre los supuestos hechos ahora denunciados. No se han constatado malos tratos físicos o psicológicos, ni abusos físicos o sexuales respecto de menor alguno. Tampoco se halló celda de castigo o calabozo alguno. Por otro lado, no consta en los archivos de esta Fiscalía denuncia individualizada alguna por hechos similares ocurridos en el citado centro.
Por su parte, la DGPMF realizó otra exhaustiva investigación, que llegó a la misma conclusión, documentada a través del pertinente informe. Tras su estudio y valoración, y por todo lo anterior, en fechas 17 de Abril y 4 de Junio de 2007, respectivamente, se decidió archivar los citados expedientes, lo que fue debidamente notificado a la ONG Human Rights Watch.
Por todo ello, “desde el respeto que nos merecen todas las organizaciones no gubernamentales, esta Fiscalía considera que las declaraciones formuladas por los representantes de la ONG ya citada, adolecen de dato concreto alguno y en consecuencia, a nuestro juicio, pueden ser calificadas como carentes de rigor”.
Por último, manifiesta compromiso del Ministerio Fiscal en la protección de los menores, “cualquiera que sea su nacionalidad, así como nuestra convicción de que el ejercicio de las acciones legales que procedan en cada caso debe hacerse con el máximo rigor, y utilizando los procedimientos y las garantías procesales que corresponden a un avanzado Estado social y democrático de Derecho como es el nuestro”.