MADRID, 29 (EUROPA PRESS)
El psiquiatra forense José Cabrera ha asegurado este miércoles que nadie hizo un estudio microscópico de los huesos hallados en la finca de Las Quemadillas, en Córdoba, donde supuestamente están los restos de los hijos de José Bretón, y ha explicado que determinar a simple vista la naturaleza lo hallado “requiere una experiencia importantísima”.
“Todos los expertos que han visto esos huesos los han visto a simple vista y nadie ha hecho estudios microscópicos, algo que no se por qué nadie ha hecho porque es definitorio”, ha explicado en declaraciones a ABC Punto radio, recogidas por Europa Press.
Según ha dicho, el hecho de que a simple vista se pueda decir de esos huesos que son humanos o no “requiere una experiencia importantísima”. “He hecho mil autopsia y me dan trocitos de huesos y a simple vista me va a costar mucho trabajo decidir si son o no humanos”, ha apostillado.
Cabrera ha subrayado que la persona que firmó el informe en el que se afirmaba que los huesos eran de animales es “reputada”, pero ha apuntado que “tuvo sus dudas, a pesar de que en el informe fue muy concluyente”. Pese a ello, ha indicado que “hay muchas pruebas que concluyen que esos restos son humanos” y ha apuntado que habrá que esperar al informe del Instituto de Toxicología para tener una opinión más.
Al ser preguntado por si es posible determinar de quién son los huesos, el forense ha explicado que si no se detecta por medio de la extracción algún resto de AND en alguno de esos pequeños trozos óseos el tener la identidad cierta con un cien por cien de fiabilidad es poco probable.
Ahora bien, ha puntualizado que el juez, “que tiene una potestad, puede considerar que si esos restos son humanos, son de dos menores y están en esa finca, de quien van a ser si no (son de Ruth y José)”.
BRETÓN NO SE VINO ABAJO
Sobre el comportamiento de José Bretón, que ayer visitó Las Quemadillas tras el conocimiento de los últimos informes, ha subrayado que “una persona de la calle diría” que esta persona es “alguien malo, porque la maldad existe”.
“Un sujeto con mucho odio, con una sed de venganza sin límites, una persona muy perversa y muy anómala pero no carente de la conciencia de que hay algo justo e injusto y hay una ley que hay que cumplir”, ha agregado.
Para Cabrera si Bretón no se vino abajo ayer, no se va a venir abajo “nunca”. “Éste es el punto en el que los especialistas empezamos a preguntarnos si esa carencia de efectividad de la que ha dado muestra no será tan absoluta como para que pueda considerarse a la hora de valorar su libertad de obrar”.
“Es algo impresionante que si se enfrenta a la verdad el sujeto ayer con esos restos allí y no se inmuta algo muy sano no es”, ha concluido.