La Fundación La Caja de Canarias, la antigua Obra Social de la extinta entidad de ahorros de Las Palmas, lanza este mes de septiembre dos iniciativas sociales que consumirán la mitad de su exiguo presupuesto, de 600.000 euros en 2013. Con una dotación de 300.000 euros, la Fundación cuya comisión gestora preside Blas Trujillo, pone en la calle un programa para la inserción social, en colaboración con ONGs, con una partida de 150.000 euros, y otra para la ayuda a la adquisición de material escolar de Infantil y Primaria, por otros 150.000 euros.
El presidente de la gestora de la entidad en la que pervive el nombre y la marca de La Caja de Canarias indicó, en rueda de prensa en el Centro Iniciativas Culturales de La Caja (CICCA), que son “programas de ayuda para atender, en la medida de lo posible, la situación que vivimos ante los insoportables niveles de desempleo y con 121.000 personas sin prestación pública alguna”.
En compañía de Fernando Fernández, miembro de la gestora, Trujillo Oramas detalló que el objetivo del primer programa, de inserción social, es dotar con un máximo de 15.000 euros cada proyecto, a su vez por un máximo del 75% del coste total de la iniciativa que presente cada ONG. De este modo se garantiza llegar a una decena de organizaciones sociales. “Ojalá podamos tener en un futuro mayor volumen y mayores recursos, pero esta es nuestra acción social básica”, explicó el presidente de la comisión gestora de la Fundación La Caja.
En el caso de los 150.000 euros destinados a material escolar, Blas Trujillo aclaró que Cáritas, por su experiencia, ha sido la entidad elegida por la Fundación, sin que se cierre a otras ONG la posibilidad de participar en esta colaboración que tiene previsto alcanzar a 7.000 niños sin recursos para adquirir libros de textos para su educación y formación en los colegios.
“Serán unos 2.000 niños de Infantil y otros 5.000 de Primaria”, dijo Trujillo, quien aclaró que la Fundación se decantó por la iniciativa del material escolar después de barajar inicialmente un apoyo a los comedores escolares. Sin embargo, el paso dado por Educación del Gobierno de Canarias de abrir comedores a los niños más necesitados hizo cambiar de estrategia a la Fundación, al quedar cubierto ese frente alimenticio desde la Comunidad Autónoma.
De este modo, la Fundación La Caja de Canarias, con un presupuesto cuatro veces menor que en 2012, cuando ascendía a 2,5 millones de euros y todavía era Obra Social de la extinta Caja Insular de Ahorros de Canarias, destina la mitad de su dinero de este año a estos dos programas.
El resto, según ya ha expuesto la Fundación todavía en proceso de constitución, van a iniciativas de Cultura y Deportes (180.000 euros) 96.000 euros a recursos deportivos concretos como el Club de Ajedrez de La Caja o la vela latina, con el clásico Torneo Eliminatorio, y otros 10.000 a Medio Ambiente.
“Ya no somos la obra social de un banco que por ley está obligado a financiarnos con sus beneficios”, resaltó este lunes Blas Trujillo para recordar la nueva problemática abierta para la supervivencia de una Fundación que “sin duda”, estaría en mejores condiciones si hubiera habido una mejor gestión por parte de los dirigentes anteriores de La Caja, criticó el que fuera consejero de Empleo y diputado del PSOE, entre otros cargos públicos.