La consejera de Sanidad de Canarias, Mercedes Roldós, dijo este viernes que su departamento “protege a sus trabajadores” ante agresiones o denuncias de usuarios, si bien rechazó aclarar si lo hará con los médicos que trataron a la niña Aitana, muerta en Tenerife, si se les procesa.
“Desde luego, en otros casos, si así lo solicitan y está en el ámbito de nuestro actuación, pues claro que nosotros protegemos a nuestros trabajadores, siempre”, afirmó Roldós al preguntársele por si su Consejería defenderá a los médicos que denunciaron erróneamente que la niña podría haber sufrido malos tratos y abusos de la petición de que se les impute que ha hecho la madre de Aitana.
La consejera, que hizo estas declaraciones a preguntas de periodistas, tras presentar en Las Palmas de Gran Canaria una campaña preventiva de riesgos de salud destinada a promover un Carnaval seguro, declinó, en todo caso, precisar cómo se actuará en el caso concreto de dichos médicos, argumentando la necesidad de respetar la labor de la Justicia.
“Yo de un caso concreto no voy a hablar, porque es un tema que está sub júdice y no me corresponde a mí”, fueron sus palabras.
Aunque añadió: “lo que sí digo es que nosotros tenemos todo un programa de prevención y de atención a nuestros trabajadores de la sanidad en el caso de las agresiones que reciben, tanto verbales como físicas, y tenemos un contrato con el Consejo General de Colegios de Abogados para dar asistencia jurídica a nuestros trabajadores”.
“Pero yo, de los temas que están sub júdice, me van a permitir que tenga el máximo respeto a la Justicia”, insistió Roldós.
La consejera hizo estas declaraciones a preguntas que le plantearon después de que la madre de Aitana, la niña de tres años que falleció el 27 de noviembre a causa de lesiones achacadas por error a su compañero, pidiera al juez que declaren como imputados los médicos que dijeron que la niña pudo sufrir una agresión sexual y malos tratos.