El Ministerio de Transportes ha confirmado este jueves sus planes para privatizar la gestión de las torres de control de los aeropuertos de Gran Canaria, Tenerife Sur y Tenerife Norte-La Laguna, los únicos de las islas que se mantenían ese servicio bajo un modelo de gestión pública.
En un comunicado, el Ministerio explica que ha publicado el proyecto en su página web y ha habilitado un plazo de 20 días hábiles para que los ciudadanos, organizaciones y resto de agentes sociales presenten alegaciones y comentarios al texto con el que busca “continuar con la apertura del servicio de control aéreo a proveedores privados, tal y como ha solicitado el gestor aeroportuario”.
Recuerda que se trata de una medida “reclamada por la Asociación de Líneas Aéreas (ALA) y por la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) en diversas ocasiones, y recomendada por la Comisión Europea y la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia”
En este proceso, Aena podrá licitar los servicios de tránsito aéreo de las torres de los siguiente aeropuertos: Bilbao, Gran Canaria, Málaga-Costa del Sol, Palma de Mallorca, Santiago-Rosalía de Castro, Tenerife Norte-Ciudad de La Laguna y Tenerife Sur.
“El objetivo es mejorar la competitividad de nuestros aeropuertos, manteniendo unos niveles óptimos de calidad y seguridad y, en última instancia, beneficiar a los usuarios del transporte aéreo”, añade el Ministerio. Desde hace tiempo, ya tienen gestión privada las torres de control de los aeropuertos de Lanzarote, Fuerteventura, La Palma y El Hierro.
Huelga de controladores
Este sector es el mismo que convocó la huelga que comenzó el 30 de enero y se prolonga el 6, 13, 20 y 27 de febrero. Los aeropuertos canarios afectados son los de La Palma, Lanzarote, El Hierro y Fuerteventura, los mismos que tienen una gestión privada.
La huelga se ha convocado tras considerar a las negociaciones del IV convenio colectivo como un fracaso. En la reunión de la comisión negociadora celebrada en enero, Saerco puso sobre la mesa una propuesta de incremento del IPC para los años 2021 (0%), 2022 (1%), 2023 (2%) y 2024 (2,5%) que, según los sindicatos, no satisface las expectativas de los trabajadores “al quedar muy lejos de su propuesta”.
El objetivo de esa huelga es “apostar por la consolidación de un sector crucial en un país donde el turismo es uno de sus pilares de crecimiento, y que ha demostrado una madurez y el mantenimiento de unos estándares de calidad, seguridad y puntualidad muy elevados”.