Las presas dependientes del Cabildo de Gran Canaria están al 39,7% de su capacidad tras las fuertes precipitaciones caídas en el mes de octubre en la isla redonda, tal como reflejan los datos hechos públicos por el Consejo Insular de Aguas esta semana.
En total han entrado en los ocho embalses 1,6 millones de m³ de agua, unas cifras pequeñas teniendo en cuenta que la isla sufrió las peores lluvias en los últimos 50 años, según la propia Corporación insular. Esto se ha debido, según desvela el gerente del Consejo Insular de Aguas, Gerardo Henríquez, porque las precipitaciones fueron por debajo de los 300 metros y las presas están en la parte alta de los cauces de los barrancos. No obstante, la buena noticia es que la temporada de lluvias comienza ahora cuando se aproxima el invierno.
A ello hay que añadir que las borrascas tuvieron mayor incidencia en la vertiente norte y este de la isla, y las presas públicas se sitúan sobre todo en los barrancos del sur y oeste grancanarios. De esta manera, en global el volumen acumulado de agua aumentó aproximadamente un 10%.
El embalse en el que más agua entró fue en Soria, donde aumentó el nivel en 600.000 m³ de agua y tiene su capacidad en estos momentos al 9%. La presa de Chira fue la segunda que más agua recogió, al aumentar su volumen en más de 468.000 m³ de agua, pasando de estar en septiembre al 15% al 23% actual.
Tras las dos presas más importantes de la isla, le sigue el embalse Gambuesa en San Bartolomé de Tirajana, que pasó de estar al 53% de su capacidad al 84% actual. Este embalse está construido por encima del de Ayagaures, que disminuyó su volumen en 1.713 m³ de agua respecto a septiembre, estando al 9% de su capacidad.
En cuanto a la presa situada en el barranco de Fataga, esta ha pasado de estar al 6% a estar al 40% de su capacidad, merced a la entrada de 111.617 m³ de agua. La otra presa en la que se aumentó su porcentaje fue la de El Mulato, que con la entrada de 57.000 m³ de agua pasó de estar al 54 al 61%. Por su parte, los embalses de Candelaria y Vaquero fueron los dos en los que disminuyó el nivel del agua, al pasar de estar al perder el primero 8.700 m³ de agua (del 29% al 27%) y la segunda 8.700 m³ de agua (del 72% de su capacidad al 68%).
Las presas del norte, casi llenas
Esta visión se contrapone a la de las presas del norte de la isla, que tienen su capacidad casi al 100%, sobre todo gracias a las lluvias del último fin de semana. Así, desde la Comunidad de Regantes del Norte de Gran Canaria explican que el domingo a las 17.00 horas se llenó totalmente Las Garzas, que tiene una capacidad de más de 503.000 m³ de agua. Mientras, a la de Lugarejos le falta solo siete centímetros para llenarse entera, cuando antes de las lluvias del pasado fin de semana le faltaban 40 centímetros para llegar al tope.
En cuanto a las presas conocidas como las de la cumbre (Las Hoyas, Lugarejos y Los Pérez), dos de ellas presentan unos buenos datos. Así, el estanque de Las Hoyas está al 90% de su capacidad, mientras que Lugarejos está casi al 100%. Sin embargo, Los Pérez le falta aún un 40% para completarse. Los regantes del norte explican que si en los próximos días no llueve, tienen pensado abrir la de Lugarejos para aumentar el nivel en la de Los Pérez, la situada a menor cota.
Por otro lado las presas situadas en La Aldea de San Nicolás recibieron algo de agua en las primeras lluvias del mes de octubre. De esta modo, la de Caidero de La Niña está al 17%, la de Siberio al 65% de su capacidad y la del Parralillo al 32%; en conjunto las tres están al 42%. Desde la Comunidad de Regantes del municipio más occidental de Gran Canaria apuntan que con el temporal de finales del mes se evitó usar el agua acumulada para el riego ya que los agricultores pudieron aprovechar las precipitaciones.