El Gran Telescopio de Canarias realiza las primeras captaciones de luz estelar

El coordinador de Proyectos del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), Juan Antonio Belmonte, aseguró este jueves que el Gran Telescopio de Canarias (GTC) es “una revolución” que situará a España como “potencia mundial” en astronomía. A las instalaciones acudirá este viernes día 13 el Príncipe Felipe, con motivo de la primera luz.

Belmonte, que participa esta semana en un curso de verano de El Escorial, afirmó que el GTC será, “casi con seguridad, un revulsivo” para la Ciencia española “tan importante como la creación del propio Instituto de Astrofísica de Canarias que lo ha generado”.

El investigador, que es también el presidente de la Sociedad Europea de la Astronomía en la Cultura (SEAC), recordó que a principios de los años 80 se creó el IAC y que desde entonces ha servido de “motor fundamental” para el desarrollo de la Astrofísica en España.

El GTC, subrayó, situará a España “en un nivel más elevado” en astronomía, ya que ahora mismo solo es “una potencia media”.

El Gran Telescopio, dijo Belmonte, “permitirá realizar un tipo de experimento que hasta ahora sólo se permitían el lujo de hacer astrónomos norteamericanos o británicos y representará una gran repercusión para nuestra comunidad”.

El viernes se comprobará que los sistemas operativos de guiado o de adquisición funcionan correctamente, al introducir un rayo de luz de una estrella a través del telescopio. La ceremonia será presidida por el Príncipe, que además es Astrónomo de Honor del Instituto de Astrofísica de Canarias.

Juan Antonio Belmonte añadió que la inauguración del GTC será dentro de un año, cuando el telescopio esté totalmente a punto y con instrumentos de tensión ya instalados en sus focos.

El cielo palmero, uno de los mejores del mundo

Después de siete años de trabajos de construcción y cuatro congresos para organizar su rendimiento, el Gran Telescopio de Canarias se alza como el mayor del mundo con un espejo primario segmentado en treinta y seis metros que hacen un total de 10,4 metros de diámetro, lo hasta ahora nunca visto en un solo aparato.

La jornada de este viernes será histórica para La Palma, un lugar privilegiado para la observación nocturna como ninguno. La isla bonita posee uno de los tres cielos más limpios del mundo junto con Hawai y Chile. Un cielo del que los palmeros se sienten muy orgullosos y del que piden sea Patrimonio de la Humanidad.

La situación geográfica, la influencia de los vientos alisios y la protección ejercida por el mar de nubes de la polución que emiten las ciudades han sido determinantes para la transparencia de un cielo privilegiado para la observación astronómica. A ello se une la aportación ciudadana con el estricto cumplimiento de la ley del cielo que establece un uso adecuado del alumbrado, el control de estaciones radioeléctricas que pueden interferir a los observatorios, la prohibición de actividades industriales por encima de los 1.500 metros, y las rutas de los aviones que sobrevuelan la isla. Con estas medidas se evitan cuatro tipos distintos de contaminación: lumínica, atmosférica, y la que pueden provocar las rutas aéreas

A partir de la primera luz comienza toda una fase de ajustes hasta su llegada al “día uno”, fecha a partir de la cual, tras esa etapa de pruebas y puesta a punto, el telescopio comienza a ser utilizado por toda la comunidad astronómica a la que va a servir. Ese “día uno” será en 2008, cuando será inaugurado oficialmente por los Reyes de España.

Más de doscientos científicos se encuentran ya en la isla bonita para participar del importante acontecimiento. Nadie ha querido perderse el estreno del telescopio más grande del mundo que, sin duda, pone a la isla, a Canarias y a España a la vanguardia mundial de la ciencia.