El presidente de la Junta de Personal del área de salud de Gran Canaria, José Alfaro, amenazó este miércoles a la Consejería de Sanidad con realizar una huelga en el área sanitaria si el Gobierno de Canarias no reconsidera los “monstruosos” recortes en el presupuesto para 2011, cifrados en 309 millones de euros, que afectan a las prestaciones a los ciudadanos, “rebaja” los acuerdos de las mesas sectoriales de Sanidad y “modifica sustancialmente las situaciones laborales, económicas y sociales” de los profesionales.
“Queremos mantener nuestros acuerdos, las situaciones que hemos acordado con el Gobierno de Canarias. Vamos a concentrarnos, movilizarnos y llegaremos a la huelga si esto no se arregla”, resume José Alfaro, quien se concentró con un centenar de profesionales sanitarios a las puertas del hospital Doctor Negrín, en Las Palmas de Gran Canaria, aunque las movilizaciones se sucedieron también en otros centros hospitalarios del Archipiélago.
El representante de los 11.000 trabajadores de la Sanidad en Gran Canaria señaló que “nosotros plantearemos diálogo con la Administración”. “Hemos solicitado el 15 de noviembre una reunión con el consejero de Sanidad, Fernando Bañolas, y hoy todavía no tenemos ni fecha ni hora”, censuró, antes de exponer que se sienten “indignados porque [la Consejería] está relegando a la Junta de Personal, que el es órgano de representación de los trabajadores, a una situación extraña”.
“Nos sentimos humillados y estamos indignados con las medidas que quiere tomar el Gobierno de Canarias contra los trabajadores públicos”, enfatizó Alfaro, al tiempo que precisó que el Ejecutivo autonómico “ha sacado una Resolución el 3 de noviembre donde recorta los acuerdos de las mesas sectoriales de Sanidad y modifica sustancialmente las situaciones laborales, económicas y sociales”.
“Vamos a comenzar con movilizaciones y en caso de agotar esta situación pues vamos a procurar que los trabajadores se conciencien para una huelga”, insistió el presidente de la Junta de Personal, quien calificó la situación de “nefasta” para la Sanidad Pública porque “influye mucho en las prestaciones”. “No queremos llegar a una huelga, pero si nos dejan otra salida lo debemos hacer”, recalcó.