Intersindical Canaria, a través de su Federación de Salud, ha emitido este sábado un comunicado en el que denuncia la actitud del Gobierno canario a la hora de imponer nuevos criterios de reordenación de las listas de contratación. Según el sindicato, la preponderancia de la nota de examen frente a méritos y formación, “potenciará , de forma encubierta, los tratos de favor entre políticos y altos directivos”.
Lamentan que esta iniciativa se adopte en época de “vacas flacas” y alertan que puede provocar un “estallido social de inesperadas consecuencias”, al considerar que enfrenta a miles de interinos que han desempeñado durante años su trabajo en la función pública con los que se incorporan a la actividad laboral al haber finalizado sus estudios.
“Resulta sospecho que el Gobierno de Canarias pretenda vincular las listas de contratación a una mera prueba teórica o examen, donde existe un espectro político salpicado por la corrupción”, señala la nota de Intersindical Canaria, que hace referencia a “la actitud mantenida por el propio Presidente del Gobierno de Canarias, D. Paulino Rivero, tratando de enchufar a su sobrina en el Ayuntamiento de Arona como Policía Municipal”.
La Federación de Salud del sindicato denuncia que los cargos públicos del Gobierno de Canarias serán los encargados de “elaborar, custodiar y realizar esos exámenes, y posiblemente filtrar a muchos otros ”sobrinos y sobrinas“ el contenido de las pruebas a fin de que se coloquen en los mejores puestos de esas listas de contratación” . Según Intersindical, los gestores del Servicio Canario de Salud llevan tiempo intentando que algunos puestos se cubran con la “creación de perfiles específicos o con puestos de conifianza, propiciando el enchufismo y la desprofesionalización.
“La Consejería de Sanidad, con el PP al frente, no es ajeno a éste oscurantismo, pues además de ser este partido político el que está de actualidad en los medios de comunicación a nivel estatal, no precisamente por su transparencia en los procesos de gestión; en la Comunidad Canaria tenemos la experiencia propia de cómo los intereses políticos y particulares de ”unos pocos“ son los que propician que se destinen elevadas partidas presupuestarias al negocio de la sanidad privada, manteniendo como justificación, el argumento de las listas de espera en la sanidad pública”, señala el comunicado.