Son uña y carne de Tu Destino Rural, una empresa dedicada a poner en valor propiedades y convertirlas en un recurso económico y patrimonial. Álvaro González y Yurena Álvarez nacieron en Santa Brígida (Gran Canaria), se conocen desde hace 12 años y fueron compañeros de estudios de Arquitectura. Ahora caminan juntos en esta aventura emprendedora.
“Chocamos bastante pero lo llevamos con dignidad”, dicen entre risas. Él lo ve todo en su conjunto, como a vista de pájaro. Ella camina pegada al suelo para sentir la tierra que pisan. “Como un globo y su hilo, que tienen que ir pegados”, explican. Quizá ese sea el secreto de su primer éxito, ya que hace unas semanas ganaron el premio a la iniciativa empresarial de la Universidad de Las Palmas de G.C.
“No contábamos con ello. Fue una sorpresa y una inyección de energía”, comentan. “Alguien más cree en lo que estás haciendo y te hace confiar más en el proyecto”. En un paraje para muchos desconocido como la finca El Galeón, junto al casco urbano de Santa Brígida, atienden una de sus primeras entrevistas como empresarios.
Pregunta. ¿De dónde sale la idea de Tu Destino Rural?
Respuesta. Mi proyecto final de carrera -comenta Álvaro- era la reactivación en Roma de una zona arqueológica que quedaba alejada del centro. Me pregunté que si ese patrimonio era importante para ellos, por qué el nuestro no podía serlo. Cuando se terminaron nuestros respectivos contratos de trabajo, decidimos empezar con este tema.
P. ¿Qué hacen exactamente?
R. Poner en valor propiedades que nos llegan en 'estado cero', sin productividad, y convertirlas en un recurso económico e incorporarlas a la oferta turística actual como lo que llamamos 'producto rural excepcional'. Algo único por las características del sitio y la actividad que se ejecute. Si no ponemos en conocimiento los valores patrimoniales de esa propiedad, pueden llegar a perderse con el paso del tiempo o por desconocimiento.
P. ¿Por ejemplo?
R. El Colmenar, en Valsequillo, es un antiguo cuartel militar de 1530 con caballerizas que está catalogado como Bien de Interés Cultural, el máximo grado de protección. Estudiamos sus posibilidades, en función de lo más apropiado según estudios de la normativa vigente y las circunstancia económicas. Ahora mismo está cerrado, sólo se visita previa solicitud en el Punto de Información Turística y no se le está sacando rendimiento. A pesar de ser la primera edificación del municipio. Ahora mismo pide a gritos ser conocido y visitado. Se plantea la posibilidad de que la Asociación de Artesanos de Valsequillo, pueda ubicar en este lugar su sede, de manera que los visitantes puedan visitarla y participar en el proceso de creación artesanal, talleres, cursos...
P. ¿Qué otras propiedades han visitado?
R. La Casa Roja Los Almendros, una edificación del siglo XIX y de las pocas en Valsequillo relacionada con la uva y elaboración del vino. Es una bodega-lagar que luego se destinó a vivienda y actualmente no tiene aprovechamiento. Sus propietarios están muy preocupados por conservarla, y estarían dispuestos a ceder la propiedad por un período de tiempo si alguien la rehabilitase.
P. ¿Qué han pensado para ese lugar?
R. Ubicar la 'Casa de La Miel, El Queso y El Vino'. Es de fácil acceso desde la carretera principal que comunica Telde con Valsequillo. Aparte de degustación de productos artesanales, se convertiría en un centro dinamizador relacionado con la de elaboración del queso, la apicultura y envasado de la miel. Se podría situar allí un punto de información y comercializar los productos con un formato diferente.
P. Imagino que hay buena disposición siempre y cuando esto no sea costoso para los propietarios...
R. Hay que adecuarse a los recursos, ofrecer soluciones reales. Sentimos que cuando hablamos, la gente se involucra. Vemos posibilidades, aunque siempre existe el tema de la inversión inicial. Pero el informe previo lo hacemos de manera gratuita. Lo importante es que el propietario conozca los valores, las posibilidades que tiene y a qué puede dedicar esa propiedad.
P. ¿Qué necesitan para que les vaya bien?
R. Un margen de confianza como nueva empresa. Hemos conseguido que nuestro proceso sea seguro y esté avalado por una documentación fiable, eficiente y funcional, pero sí, existe una parte de experimentación e innovación que es difícil de entender. También la cooperación de distintas entidades, asociaciones y administraciones. Ahora mismo ni se cuenta con grandes sumas de dinero ni con capacidad de poner en marcha actividades grandes.
P. Va a hacer un año desde que comenzaron con su idea. ¿Qué han sacado en este tiempo?
R. Lo primero, la experiencia. El tema de emprender no es innato en nosotros. Nos han inculcado que si estudiabas tenías tu profesión y un porvenir, y un trabajo para toda la vida y así ser una persona feliz para siempre. Los esquemas se rompen y descubres que hay otras alternativas como reformular nuevas ideas. Aprovechar lo que sabes para hacer otras cosas. Todo el proceso de enseñanza es una apertura de mente, para que en momentos como este no te bloquees y busques alternativas.
P. O sea que esto es posible incluso para mucha gente que se ve incapaz.
R. En el momento que alguien toma medidas para ahorrar, es una innovación y es emprendeduría. Lo importante es hacerlo. En casi todas las áreas hay quienes buscan alternativas y sin saberlo están emprendiendo. Y no hace falta etiquetarlos como tal. Simplemente es querer cambiar el modo de hacer las cosas.