Ha pasado casi un mes desde la desaparición del turista británico Jay Slater, que viajó a Tenerife para asistir a un festival de música con otros dos amigos. Fue el pasado 17 de junio, un día después, un operativo de la Guardia Civil comandado por agentes del Grupo de Rescate Especial de Intervención en Montaña (GREIM) y un helicóptero, iniciaron la búsqueda en el Parque Rural de Teno, concretamente en el entorno del caserío de Masca, en el municipio de Buenavista del Norte. Desde entonces, comenzaron a salir a la luz una serie de hipótesis de lo que realmente le podría haber ocurrido, hasta que este lunes 15 de julio, el Grupo de Rescate e Intervención en Montaña de la Guardia Civil localizó el cuerpo sin vida de una persona en la zona donde se le buscó por primera vez, y que, según apuntan, puede tratarse del joven desaparecido.
En un primer momento, y según publicaron algunos medios británicos, Jay Slater acabó en el apartamento de unas personas que había conocido la noche del festival, y que quedaba muy lejos de donde se estaba alojando. Sus amigos declararon que estableció contacto con ellos, pero ya con muy poca batería en su teléfono móvil advirtiendo de que no había podido coger la guagua, que se encontraba caminando sin saber dónde estaba y que tenía mucha sed.
Una semana más tarde, el dispositivo de búsqueda se extendió a otras zonas de Buenavista del Norte, más allá del barranco de Masca, donde fue geolocalizado por última vez antes de quedarse sin batería. Varios medios británicos se hicieron eco del “posible avistamiento” del turista birtánico en Santiago del Teide, a casi seis kilómetros del caserío de Masca, y comenzaron a divulgar una imagen borrosa captada por una cámara en la que se pudo distinguir la silueta de una persona aparentemente joven andando varias horas después de que se le perdiera el rastro.
Sin embargo, las búsquedas en esa zona de la isla no daban resultados sobre su paradero por lo que se amplió el dispositivo hacia Las Américas y Los Cristianos (donde se alojaba con sus amigos), pero todo fue por una pista que resultó ser falsa y las batidas al sur de la isla duraron unas horas.
Más tarde, una unidad especializada del servicio cinológico de la Guardia Civil se desplazó desde Madrid a Tenerife para incorporarse a las labores de búsqueda. Estos agentes están especializados en desapariciones de personas en “grandes extensiones de tierra” con apoyo de perros adiestrados para grandes superficies. Las labores consistían en intensas y repetidas batidas por los barrancos, caminos y senderos del abrupto terreno, que arrancaban a primera hora de la jornada y finalizaban al atardecer, cuando la falta de luz solar dificultaba el rastreo. Mientras tanto, la Guardia Civil seguía manteniendo “todas las hipótesis están abiertas”.
El viernes 28 de junio, cuando habían pasado ya 12 días sin noticias del joven, la Guardia Civil anunció que se iniciaría un macrodispositivo de búsqueda del turista británico de 19 años. Para ello, y teniendo en cuenta las dificultades que presentaba el terreno en la zona de Masca, la cual es abrupta, rocosa, llena de desniveles y con multitud de barrancos, senderos y caminos, se solicitó la colaboración de todas aquellas asociaciones de voluntarios de Protección Civil o Bomberos. El punto de inicio se fijó en el Mirador de la Cruz de Hilda para iniciar una búsqueda lógica y ordenada, que transcurrió sin novedades.
Dos días más tarde, la Guardia Civil dio por finalizado el dispositivo pero continuaban abiertas todas las líneas de investigación, según informaron fuentes del cuerpo de seguridad.
Tras la desaparición, la madre de Jay Slater declaró en una carta que, tanto ella como toda la familia, estaban “devastados” por la situación pero pedían que el caso continuase abierto y sin “obstáculos” por parte de los medios de comunicación.
“Jay es un tipo normal que está en su tercer año de aprendizaje, y es un joven muy popular con un gran círculo de amigos. Somos una familia muy unida y estamos absolutamente devastados por su desaparición. Las palabras no pueden describir el dolor y la agonía que estamos experimentando. Él es nuestro hermoso niño con toda su vida por delante y solo queremos encontrarlo”, señaló Debbie Duncan en un comunicado remitido a través de la asociación LBT Global.
En este sentido, mostraron su “sincero agradecimiento” a las autoridades españolas y rogaron respeto a su “privacidad” para que la Guardia Civil prosiga con su trabajo. Tabloides británicos especularon con posibles teorías sobre la desaparición, además de sacar a la luz supuestos episodios del pasado del joven.
“Somos conscientes de las teorías de conspiración y la especulación en las redes sociales y algunos sitios web, y sólo podemos describir esto como vil, los comentarios negativos son extremadamente angustiantes para nuestra familia. También abrazamos el amor y el apoyo que hemos recibido de todo el mundo”, recoge la carta.
Finalmente, este lunes 15 de julio, el Grupo de Rescate e Intervención en Montaña de la Guardia Civil localizó el cuerpo sin vida de un joven en la zona donde se buscaba a Jay Slater. Todos los indicios apuntan a que puede tratarse del turista británico, y que, según explica las autoridades, pudo haber fallecido debido a una caída accidental en la escarpada e inaccesible zona donde ha sido encontrado.
Según la Benemérita, el hallazgo se ha producido gracias a la incesante y constante búsqueda llevada a cabo por las diferentes unidades de la Guardia Civil, tras 29 días sin saber nada del joven.
En estos momentos se esperan los resultados de la autopsia que confirme el triste desenlace y los motivos de su muerte.