Trabajadores de mantenimiento del Hospital Doctor Negrín de Gran Canaria, empleados a través de una contrata, planean convocar una huelga contra la empresa Clece, a la que acusan de despedir a parte de su plantilla para rebajar costes contratando a personal más barato.
Los quirófanos, el área de consultas externas, los servicios de radiología y la unidad de cuidados intensivos, entre otros, son los departamentos donde operan esos empleados de mantenimiento, 48 en total, según ha asegurado el sindicato Comisiones Obreras, cuyo delegado de personal en la empresa Clece, Francisco Muñoz, ha anunciado este viernes su propósito de hacer una huelga que sería indefinida.
La protesta se pondría en marcha, según destaca Muñoz en un comunicado, como un nuevo paso tras los paros parciales que este colectivo de trabajadores ha iniciado hace tres días.
Las movilizaciones se han puesto en marcha, según ha explicado a Efe el sindicalista, tras intentar sin éxito establecer un diálogo con la empresa para tratar de que dé marcha atrás en una política de despidos selectivos que -asegura- ha emprendido en las últimas semanas para desprenderse de empleados con derechos de antigüedad y sustituirlos por otros menos costosos.
Esa política está conduciendo a un “desmantelamiento de una plantilla formada y altamente preparada que puede traer consecuencias para los pacientes, familiares y todos los trabajadores”, según ha denunciado la Federación de Industria de Comisiones Obreras de Canarias en un escrito de respaldo a las denuncias del colectivo.
En la misma línea, Francisco Muñoz ha insistido en que los empleados de Clece en el Doctor Negrín “temen por la seguridad” de usuarios y trabajadores, con el argumento de que los nuevos contratados que les están sustituyendo tienen menor formación y conocimiento de las maquinarias y los equipamientos del hospital de cuyo mantenimiento está encargada la empresa.
Esta pretende, según ha sostenido, reducir de ese modo costes de personal a fin de presentarse a un nuevo proceso de adjudicación de servicios de mantenimiento que se proyecta para dentro de unos meses en el propio centro sanitario, sin plantearse si con su actitud reduce o no la seguridad del hospital grancanario.
Muñoz ha criticado además la postura que ante este conflicto han mantenido hasta el momento el Servicio Canario de Salud y el Gobierno autonómico en general, que ha opinado que “deberían tomar cartas en el asunto, como responsables de que los servicios se presten en el hospital con todas las garantías”, aunque hasta el momento no se han prestado a mediar en el conflicto.
La Federación de Industria de Comisiones Obreras de Canarias ha acusado de “falta de ética” al Servicio Canario de Salud por “hacer la vista gorda ante este despropósito”.