ROMA, 14 (EUROPA PRESS)
Unos 925 millones de personas sufrirán este año hambre crónica, 98 millones menos que en 2009, aunque sigue siendo una cifra “inaceptablemente alta”, según un informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y el Programa Mundial de Alimentos (PAM) de la ONU.
El director general de la FAO, Jacques Diouf, señaló que “cada seis segundos muere un niño por problemas relacionados con la desnutrición”, de manera que “el hambre sigue siendo la mayor tragedia y el mayor escándalo del mundo”. “Esto es absolutamente inaceptable”, añadió.
En este sentido, Diouf advirtió en Roma, donde la FAO tiene su sede, de que la dimensión del problema del hambre “hace que sea extremadamente difícil alcanzar no sólo el primer Objetivo de Desarrollo del Milenio (ODM), sino también los demás ODM”. Los ODM son ocho, y el primero de ellos es “erradicar la pobreza extrema y el hambre”.