La revista Interviú ofrece en su último número el reportaje “Bajo el síndrome de Tony King”, que detalla que, mes y medio después de la desaparición de Yeremi Vargas, los investigadores piensan que el niño fue secuestrado por un delincuente sexual.
Según la revista, se están revisando las coartadas de cien agresores sexuales que viven en la isla de Gran Canaria, 28 de los cuales son ciudadanos británicos fichados por haber cometido delitos de este tipo en su país antes de instalarse en Canarias.
El niño Yeremi Vargas, de 7 años, desapareció el sábado día 10 de marzo, a mediodía, cuando jugaba en un solar de la zona de Los Llanos de Vecindario, en el municipio grancanario de Santa Lucía, a pocos metros de su abuelo y dos tíos, después de que la abuela llamara a la familia para comer y todos entraran en la vivienda menos él.