Los protectores solares aplican el nuevo sistema de etiquetado europeo
Desde este verano los consumidores europeos podrán comparar mejor las cremas de protección solar puesto que está culminando la aplicación de un nuevo sistema de etiquetado más claro y comprensible. Según la Comisión Europea entre el 70 y el 100% de la cremas comercializadas por las tres cuartas partes de los fabricantes ya aplican las nuevas etiquetas que eliminan expresiones como pantalla total, bloqueante solar o protección al 100% ya que no hay ningún producto de protección solar que proteja completamente frente a la radiación UV.
Además, en base a un paquete de medidas aprobadas en septiembre de 2006 por el Ejecutivo comunitario, los envases de las cremas solares deben utilizar descriptores verbales normalizados ?protección baja, media, alta o muy alta- junto con los tradicionales indicadores del factor de protección solar para que el consumidor pueda elegir el producto más adecuado.
El sello normalizado UVA que indica una protección cuantificada mínima contra este tipo de radiación, también aparece en los envases de las cremas. El denominado factor de protección solar que aparecía habitualmente en las etiquetas sólo se refiere, normalmente, a los rayos UVB ?causantes de las quemaduras solares- y no a los rayos UVA que son los responsables del envejecimiento prematuro de la piel y que afectan al funcionamiento del sistema inmunitario. Ambos agravan considerablemente el riesgo de padecer cáncer de la piel.
Por ello, los productos que ofrecen únicamente protección UVB pueden dar una falsa sensación de seguridad ya que permiten que los rayos UVA lleguen hasta la epidermia. Pero, no sólo basta con elegir adecuadamente el producto sino que, para que sea completamente eficaz, es necesario aplicarlo de forma correcta.
Según explica el Ejecutivo comunitario para alcanzar la protección indicada en el factor de protección solar debe aplicarse una cantidad de 2 miligramos por centímetro cuadrado (mg/cm²) lo que significa aproximadamente 36 gramos, es decir seis cucharitas de té, de crema solar para el cuerpo de un adulto y el doble de lo que actualmente utilizan los consumidores.
Además, es necesario volver a aplicar esta cantidad tras cada baño y al secarse con la toalla para mantener el nivel de protección, indica Bruselas. Esta información sobre la aplicación del producto debe aparecer, igualmente, en la etiqueta.
No obstante, la Comisión Europea recuerda que el uso de la crema solar es sólo una de las múltiples medidas que existen para protegerse del sol y, por ello, recomienda a los consumidores que sumen otras prácticas como evitar una exposición excesiva en las horas críticas (entre las 11 y las 15 horas) y que los bebés y niños tomen directamente el solo; la utilización de sombreros y gafas de sol; y el uso de productos que protejan tanto de los rayos UVB como de los rayos UVA.