La emisora Radio San Borondón se enfrenta a una sanción de 100.001 euros que tiene que hacer frente antes del 20 de marzo y que hace peligrar su continuidad ya que esta sanción, del Gobierno de Canarias, supondría el cierre inmediato de este medio de comunicación y del Centro de la Cultura Popular Canaria, entidad cultural con más de 38 años de trayectoria.
Para este medio de comunicación esta sanción es “arbitraria”, carece de criterios y no obedece a un plan de inspección, sino que responde “a un claro ataque político por ser un medio de comunicación plural, crítico y que ha dado voz y prestado apoyo siempre a los sectores marginados y acosados por los poderes económicos y políticos”.
“Radio San Borondón ha tenido desde sus inicios, como objetivo fundamental, la denuncia de los numerosos casos de corrupción, en especial en buena parte de las administraciones públicas”, señala la emisora, que va a iniciar una campaña popular de apoyo en las redes sociales y en las calles, con recogida de firmas de rechazo a la sanción, así como para recaudar fondos para hacer frente al pago de los 100.001 euros que se ejecutará el 20 de marzo, si no se logra la paralizarlo.
La emisora no obtuvo en 2011 ninguna de las 155 frecuencias que sacó a concurso el Gobierno de Canarias y denuncia que el ejecutivo “regaló la mayor parte a conocidos empresarios del cemento, que luego se han dedicado a venderlas o alquilarlas de manera ilegal, según las propias bases del concurso”.
Pese a que hay más de 100 emisoras en Canarias que continúan emitiendo sin licencia sin interferir en las frecuencias licitadas, como hace Radio San Borondón, sólo a tres de ellas se les ha notificado una resolución sancionadora, entre ellas Radio San Borondón, “pero a las demás se las ha perdonado, no se les ha abierto expediente y han seguido emitiendo sin cortapisas”, según esta emisora.
La emisora y el Centro de la Cultura entienden que esta sanción es “un eslabón más de la persecución e intento de control político a los medios de comunicación, y un paso más en el intento continuo de CC, ahora con la complicidad del PSOE, por acabar con este medio de comunicación que es una voz crítica en medio de un panorama informativo dócil”.