Un operativo de la Policía Local y el servicio de Limpieza del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria se desplazó en la mañana de este miércoles a la rotonda de La Ballena tras el vertido de 33 botes de pintura en plena calzada. El accidente provocó el cierre parcial de la infraestructura vial, clave para las comunicaciones en la parte alta de la ciudad.
El accidente, que tuvo lugar a primera hora de la mañana, provocó alteraciones en los accesos a la zona de La Ballena desde la GC-3 (Circunvalación) y retenciones moderadas en la zona y la Avenida de Escaleritas.