José Miguel Camejo Gallardo, el número dos del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) en la provincia de Santa Cruz de Tenerife, falleció la tarde de este miércoles en su despacho de la capital tinerfeña tras dispararse un tiro con su arma reglamentaria, confirmaron a este periódico fuentes del cuerpo. Su fallecimiento ha causado una gran conmoción en la Policía y en todos los ambientes relacionados con ella ya que se trataba de un comisario muy respetado por su profesionalidad y su buen carácter.
El comisario Camejo pasó a ser el mítico León de la VI Brigada de la Unidad de Intervención Policial de Bilbao durante finales de los noventa y principio de 2000, cuando sirvió tanto en Euskadi como en Navarra en años difíciles del terrorismo y la violencia callejera. Una histórica foto en la que se le ve enfrentándose al líder de Batasuna Arnaldo Otegui en una manifestación circulaba este mismo miércoles por las cuentas de WhatsApp de toda la Policía española.
Tras diversos destinos, José Miguel Camejo recaló hace casi una década en la Jefatura Superior de Policía de Canarias, en Las Palmas de Gran Canaria, donde también estuvo al frente de la UIP y, posteriormente, de la Brigada de la Policía Judicial. Un incidente con la comisaria provincial, Sagrario de León, que purgó en 2012 a todos los cargos policiales anteriores a la llegada del PP al Gobierno, le condujo a pedir un cambio de destino, y desde hacía unos cinco años ocupaba la plaza de jefe de la Unidad de Coordinación Operativa de Santa Cruz de Tenerife, a las órdenes directas de otro histórico de la Policía en Canarias, el comisario Ignacio Bádenas.
Camejo ha sido profusamente distinguido a lo largo de su vida profesional, especialmente en Canarias, donde lo ha reconocido el Gobierno regional y varios cuerpos policiales locales.
En distintos ambientes del CNP de Canarias se comentaba este miércoles el mal año que han tenido que vivir sus miembros con fallecimientos de este tipo. Empezó 2017 con el suicidio de un joven agente de la Unidad de Traslados en los calabozos del Palacio de Justicia de Las Palmas de Gran Canaria. En total, cuatro policías han fallecido de este modo.