Uno de los supervivientes del cayuco pregunta por sus cinco hermanos

Uno de los 36 inmigrantes rescatados del naufragio de un cayuco a 98 millas de Tenerife ha preguntado por sus cinco hermanos y por ocho amigos, que al parecer, iban en la misma embarcación, dijo este viernes Austin Taylor, coordinador de los Equipos de Intervención Rápida de Emergencias (EIRE) de Cruz Roja.

Este inmigrante llegó este jueves al puerto tinerfeño de Los Cristianos (Arona) a bordo de la embarcación de Salvamento Marítimo Luz de Mar junto a otras 35 personas rescatadas del naufragio, del que han sido rescatadas con vida otras doce personas, que llegarán este viernes en la Code de Gondomar de Salvamento Marítimo.

También han sido rescatados tres cadáveres del cayuco, en el que, según han declarado los supervivientes, podrían viajar en torno a las 135 personas.

El superviviente que ha preguntado por sus cinco hermanos y varios amigos es mayor de edad, igual que el resto de rescatados, y fue atendido por efectivos sanitarios poco después de llegar al puerto de Los Cristianos “y en pleno puesto médico nos dijo en inglés que estaba preocupado por sus hermanos y amigos”, explicó Austin Taylor.

Otro de los rescatados preguntó por una mujer y por un menor de edad, “lo que hace suponer que en el cayuco naufragado viajaban estas personas”, agregó el coordinador del EIRE.

Hasta el momento no se tiene información acerca de los familiares de este superviviente, ni tampoco de una mujer, pero “habrá que esperar la llegada de resto de los rescatados”, dijo Taylor, quien espera que alguno de ellos esté en ese barco, el Conde de Gondomar.

Esta embarcación de Salvamento Marítimo, en la que viajan los otros doce rescatados con vida, está previsto que llegue al puerto de Los Cristianos durante la tarde de este viernes.

Austin Taylor añadió que los equipos de rescate continúan por aire y por mar la búsqueda de los inmigrantes que naufragaron y no pudieron ser rescatados por Salvamento Marítimo debido a las inclemencias meteorológicas.

Taylor coincide con el delegado del Gobierno en Canarias, José Segura, en que ya no hay “demasiada esperanza” de encontrarlos con vida.