La saharaui Takbar Haddi, que estuvo 36 días en huelga de hambre frente al Consulado de Marruecos en Las Palmas de Gran Canaria, ha retomado la protesta en el mismo lugar para reclamar el cuerpo de su hijo, que fue apuñalado en febrero en El Aaiún.
Takbar Haddi finalizó la huelga el 19 de junio, tras ser hospitalizada por haber vomitado sangre y después de que los médicos le aconsejaran suspender su ayuno.
Esta mujer saharaui ha explicado este viernes a Efe que este viernes volvió a instalarse en frente del Consulado, donde estuvo antes acampada, pero esta vez la Policía le ha obligado a retirar de la calle las fotos de su hijo que exhibía a los viandantes.
También asegura que le han invitado a marcharse del lugar.
Haddi dice que se siente con fuerzas para retomar la huelga de hambre una vez que termine el Ramadán, el 17 de julio.
“Me encuentro tranquila y con fuerzas para seguir con la huelga aunque muera”, indica.
Además, precisa que los médicos le han comunicado que ya está recuperada y que ella se encuentra bien.
“No me duele nada, solo me duele el corazón”, resalta Takbar Haddi, que regresó ayer de Ginebra, donde relató su historia y la de su hijo en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.