Las campanadas de fin de año retransmitidas por Televisión Española (TVE) desde el municipio tinerfeño de Los Realejos superaron en dos millones de telespectadores a las que el Gobierno de Canarias contrató a las cadenas nacionales Antena 3 y La Sexta, y a la autonómica Telemadrid, por lo que pagó al menos 500.000 euros, según los primeros datos conocidos. En un comunicado emitido la tarde de este miércoles, la empresa pública Promotur Gobierno de Canarias reconocía que Televisión Española había conseguido mayor audiencia desde Los Realejos en la emisión de las campanadas canarias.
Mientras, la retransmisión de las campanadas desde la Puerta del Sol, en una acción promocional que incluyó retrasar el señero reloj de esa plaza para que a la una de la madrugada de la Península volvieran a ser las 00.00 y sonaran las campanadas canarias, se tuvo que conformar con una audiencia que no llegó a los tres millones de telespectadores, concretamente 2.799.000.
Las audiencias de las cadenas privadas contratadas por Promotur cayeron de los 4,8 millones de espectadores que acumulaban a las 00.00 hora peninsular, a esos 2,8 millones cuando llegó el momento de las campanadas canarias.
Según una nota de prensa del Ayuntamiento de Los Realejos, donde TVE montó su directo para dar las campanadas canarias, el programa especial logró un share del 33,9% con 4.803.000 televidentes. Siempre según estos datos, la conexión de TVE con el municipio a las 23:03 horas, tras las doce campanadas peninsulares, tuvo una audiencia de más de 6,3 millones de espectadores, un 37,1% del share nacional.
Al tiempo, Televisión Canaria, que también transmitió las campanadas oficiales desde la Puerta del Sol, alcanzaba un notable registro, con 275.000 televidentes, según informó este miércoles.
La ventaja obtenida por la cadena pública estatal condujo a que la empresa pública Promotur se viera obligada a incluir esos registros en su nota de prensa sobre las campanadas canarias, a pesar de que TVE jamás estuvo incluida en las informaciones preliminares del acontecimiento, ni por supuesto en la campaña institucional.
El consejero de Turismo, Isaac Castellano, ha dicho a Radio El Día que el coste de esta campaña ronda el medio millón de euros, sin que hasta el momento haya trascendido cómo se ha distribuido esa inversión. La campaña debería incluir todos los trabajos realizados por los relojeros de la Real Casa de Correos, las promos emitidas por las cadenas contratadas para la retransmisión y la retransmisión en sí misma, incluyendo costes de presentadores y la producción sobre el terreno.
Aparte hay que sumar los costes de Televisión Canaria, que desplazó a una amplio equipo de profesionales hasta Madrid, algunos adscritos a la plantilla de la casa y otros a través de la productora tinerfeña Pantalla Canaria, que se encargó de la subcontratación de equipos en la capital de España. Esa información tampoco ha sido facilitada de momento por el ente público RTVC, a la que este periódico se la solicitó la tarde de este miércoles.
Promotur está convencida de que su campaña ha tenido éxito, sin que hasta el momento se hayan computado impactos. El dato de la basura recogida por los servicios de limpieza de Madrid (30.500 kilos frente a los 21.000 del año pasado) le parece elocuente para afirmar que “la fiesta se alargó, y mucho, debido a las dobles campanadas”.
El PSOE pide que se explique “la indecente ‘clavijada”
El PSOE pide que se explique “la indecente ‘clavijada”El Grupo Parlamentario Socialista en el Parlamento de Canarias ha pedido al consejero de Turismo del Gobierno de Canarias, Isaac Castellano, que comparezca ante la Cámara para que informe del coste de la retransmisión de las campanadas de fin de año desde la Puerta del Sol de Madrid. Los socialistas han anunciado también que pedirán los expedientes administrativos completos por los que se autorizaron los gastos para esa acción promocional.
El diputado socialista Gustavo Matos dijo este miércoles que le resulta “preocupante” que esa iniciativa se haya convertido, finalmente, en una “campaña personal” de Fernando Clavijo, una “indecente clavijada” a costa del dinero público. “Resulta obsceno el despilfarro en este capricho del presidente, pues el propio consejero de Turismo ha admitido que el gasto supera el medio millón de euros”.