El Ayuntamiento de Santa Cruz celebra este viernes 11 de julio su segundo pleno monográfico sobre el estado de la municipalidad, un instrumento al alcance de las grandes ciudades que se convierte en una oportunidad de fiscalización para la oposición que, en el caso del PP en la capital, cree que se lleva a cabo en un momento de “estancamiento y paralización de la ciudad sin precedentes”.
Los populares pusieron de relieve, a través de su portavoz, Cristina Tavío, que el equipo que dirige el nacionalista José Manuel Bermúdez ha dejado de ejecutar 17 millones de euros desde el año 2011, que afectan, “en definitiva, a la creación de empleo”.
Asimismo, señalaron que, en materia de Servicios Sociales, también hay que cambiar la manera de actuar y la filosofía, pues, según los miembros del grupo popular, “se conceden ayudas, pero no se da estabilidad a las personas”, algo que también afecta a los procedimientos administrativos que, según el concejal José Carlos Acha, “requieren más agilización, coordinación y optimización de recursos, porque el Ayuntamiento funciona solo al 10 por ciento del rendimiento al que debería estar”.
El PP planteó para su debate en el pleno un plan de reactivación de la ciudad, conformado por cinco grandes prioridades en las que se plantean soluciones para los aspectos señalados, así como sobre el PGO aprobado recientemente, que, a juicio de Acha, “se han pasado tres años para aprobar el texto que es prácticamente el inicial y del que se queda fuera el 85 por ciento del suelo urbano y el fuera de ordenación, dejando otras vías para ordenar el suelo y los planes espaciales”.
Cristina Tavío manifestó, por su parte, que el alcalde “castiga a los vecinos a impuestos, cuyos ingresos no invierte”, pues explicó que en tres año de mandato “hemos sufrido la incompetencia de CC y PSOE, que nos condenan a una presión fiscal insostenible para luego no invertir ni lo que recaudan, ni lo que le adelantan otras instituciones”.
Criticó que el Plan de Ayudas Sociales de 40 millones del alcalde hasta el año 2019 “no hace sino aumentar la espiral de la exclusión en una ciudad donde 70.000 personas se encuentran en riesgo de caer en la pobreza y 27.000 no tienen trabajo.
Además, Tavío remarcó que desde el año 2011, “el IBI ha subido un 16,8 por ciento; el rodaje, un 10 por ciento; la tasa de basuras un 9,4 por ciento; la de basuras a empresas un 36 por ciento, y el Impuesto sobre Actividades Económicas un 14 por ciento”, lo que representa “una media anual de casi 600 euros por vecino”.
Para compensar la ausencia de inversión, a juicio de Tavío, el PP ha planteado para su debate las propuestas que arrancan de un plan de reformas en la administración municipal, acciones de promoción y reactivación económica, generación de empleo, educación, servicios sociales y planeamiento urbanístico.
La portavoz del PP acusó a Bermúdez de cumplir su plan de inversiones, “cuyas cuantías se van trasladando año a año, desviándose siempre para pagar otras deudas, o hacia las innumerables modificaciones presupuestarias que ha aprobado el grupo de gobierno”.