El municipio de Granadilla de Abona se ha convertido en el segundo de la isla de Tenerife con alcalde de Coalición Canaria (en este caso, José Domingo Regalado), junto al de La Laguna (José Alberto Díaz), que rechaza la entrada del gas ciudad (aire propanado) en su territorio. Así quedó de manifiesto en el último pleno celebrado en la Corporación local sureña, que aprobó por unanimidad una moción presentada en esa misma línea por la fuerza política Izquierda Unida Canaria (IUC). La empresa concesionaria de ese servicio es Redexis Gas.
Tal y como se refleja en una nota de IUC, la introducción del gas en Canarias mantiene vivo un debate que “enfrenta a una mayoría ciudadana con las oligarquías políticas que defienden y protegen a grandes sucursales y empresas como Redexis Gas (Goldman Sachs)”.
La misma fuerza política sostiene que “la apuesta por las energías renovables, a pesar del aparente consenso, a día de hoy no es una realidad, dado que desde el Gobierno central (PP) y el Gobierno de Canarias, el equipo de Clavijo, se usa como cortina de humo mientras por otro lado se introducen otros recursos fósiles y limitados como es el gas.
Izquierda Unida Canaria en Granadilla ha insistido una vez más en que “las renovables tienen que ser una apuesta firme a corto plazo” y por ello presentó esa moción “fruto del trabajo de movimientos sociales como la Plataforma contra el Puerto de Granadilla y fuerzas políticas como Podemos”.
La moción contra el gas ciudad, que se aprobó por unanimidad, es, en palabras del concejal de izquierdas Félix Miranda, “un pequeño éxito de la lucha vecinal contra el despropósito del gas ciudad en Granadilla y la nula argumentación por parte de sus defensores, pero no una victoria porque, aunque PP y CC han apoyado la moción, en otros niveles siguen empecinados en introducir ese combustible contaminante”.