El Consejo de Ministros acordó este viernes suprimir de manera definitiva las compensaciones que Canarias debía abonar cada año al Estado por la desaparición del Impuesto General sobre el Tráfico de Empresas (IGTE), lo que permite a la comunidad isleña disponer de unos 160 millones de euros más cada ejercicio en su presupuesto.
En la rueda de prensa posterior al Consejo, el portavoz del Gobierno español, Íñigo Méndez de Vigo, recordó que el proceso de desaparición del IGTE comenzó en 1991 y defendió que, transcurridos ya 25 años, es adecuado cerrar ese capítulo.
El Gobierno canario pactó con el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, la pasada legislatura el fin de las últimas compensaciones que todavía abonaba por ese tributo (parte ya se habían condonado con anterioridad), pero ese acuerdo no se pudo llevar al Consejo de Ministros durante la etapa en la que este estaba en funciones.
La decisión que ahora se toma despeja el camino a los planes del Gobierno canario para destinar esos 160 millones de euros anuales a otros fines, en este caso, al Fondo de Desarrollo de Canarias (Fdcan), que ha programado a diez años vista con propuestas de los cabildos, los ayuntamientos y la propia comunidad autónoma.
El IGTE desapareció en 1991, en virtud de una modificación del Régimen Económico y Fiscal de Canarias, que lo sustituyó por el Impuesto General Indirecto Canario (IGIC), el equivalente al IVA, aunque con tipos mucho más bajos.
En ese momento, el Gobierno canario se comprometió a compensar al Estado por la minoración que iban a sufrir sus ingresos al desaparecer ese tributo y aceptó que cada año se detrajera una cantidad por ese concepto de su participación en los ingresos de la Hacienda nacional.