El presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, ha recomendado este miércoles a su homólogo grancanario, Antonio Morales que “se tome un Almax” para que se le quite el dolor de la “úlcera” del insularismo.
En declaraciones a los periodistas a raíz de las críticas de Morales ante el desequilibrio inversor entre ambas islas, ha dicho que tiene un dolor “crónico” con el insularismo “que de vez en cuando sale”, apelando a que “todos” trabajen por el desarrollo de Canarias al margen de “polémicas estériles”.
El presidente tinerfeño ha dicho que el Cabildo trabaja para sacar adelante los proyectos que necesita la isla, como la mejora de las carreteras por ejemplo, y ha pedido al de Gran Canaria que haga lo mismo y reclame ante el Gobierno regional.
Además, ha dicho que “casi roza el ridículo” que se mire “la partida de nacimiento” de las personas que trabajan en el Gobierno de Canarias para criticar la política del Ejecutivo. “Llegamos a unos niveles un poco absurdos”, ha señalado.
Según Alonso, es “razonable” que cada isla defienda su interés “pero estar mirando siempre a los lados en vez de estar mirando de frente me parece que es un poco caduco, no sé del siglo XX o hay que ir un poco para atrás”.