Alrededor de 370 taxistas, de las 897 licencias existentes en Santa Cruz, han secundado la jornada de protesta convocada este miércoles, 26 de octubre, en la capital tinerfeña. Desde las 8.00, a bordo de sus vehículos, esos profesionales secundaron la marcha a baja velocidad realizada por las principales vías de la ciudad, lo que generó durante toda la mañana, hasta pasadas las 12.00, un importante colapso en el tráfico rodado, con las consecuentes quejas del resto de los ciudadanos que se vieron atrapados en las retenciones.
Sin haber finalizado la jornada de protesta, los convocantes de la acción ya habían anunciado otra convocatoria de paro para el próximo 7 de noviembre, con el fin de seguir insistiendo ante las autoridades municipales en la búsqueda de soluciones a sus dos principales demandas: “La tarifa única y la reactivación del proceso de rescate de licencias”, tal y como señaló el presidente y portavoz de Élite Taxi, José Miguel Ojeda.
El dirigente de ese colectivo de profesionales puso de manifiesto la escasa voluntad de los mandatarios municipales de encontrar una solución a los principales escollos de este sector del transporte, y señaló que, mientras mantienen paralizado un proceso necesario de retirada de más de 200 licencias, “convocan, justo el día de la protesta, un examen para que unas 250 personas puedan optar a otras tantas licencias para taxistas”.
Ojeda consideró que, si la mitad de esos aspirantes tiene la intención de adquirir una licencia, “esto es un desastre, ya que los que tienen opciones de jubilarse las transferirán a los nuevos profesionales, la mayoría de ellos entre 30 y 40 años, con lo cual dichas licencias no se podrán retirar al ser personas con mucha carrera profesional por delante”.
Para llevar a cabo el procedimiento de retirada de licencias, que calificó de urgente, el coste que deben asumir el Ayuntamiento y el Cabildo es de cuatro millones euros, a partes iguales, lo que, a su juicio, “se convierte en una inversión en materia de tráfico, porque se ahorran a diario más de 200 vehículos, al margen del beneficio directo para el sector”.
Durante la protesta de este miércoles, los dirigentes de Élite Taxi se quejaron de posibles cambios en las frecuencias de los semáforos de la ciudad y de cortes y desvíos de tráfico en algunas vías por las que pasaba la caravana de taxis, algo que fue negado por parte del Gobierno local, que aseguró que los tiempos de esos medios de control del tráfico fueron los de cualquier jornada.
Nuevo estudio económico con gastos directos e indirectos
En el recorrido urbano, los taxistas mantuvieron un encuentro con la directora general de Comercio y Consumo, Ángeles Palmero Díaz, que aclaró que “la Comisión de Precios se tiene que ceñir a la petición del consistorio municipal de equiparar la tarifa 1 (urbana) con la 3 (interurbana), para lo que es necesario un nuevo estudio económico con los gastos directos e indirectos del sector bien desglosados”.
Palmero valoró el estudio ya presentado, pero puso de relieve que no era suficiente; por ello, dijo que ahora hay que esperar a la nueva propuesta, con la voluntad de dar la máxima celeridad a los trámites y así lograr el objetivo de equipar ambas tarifas.