Nadie pone en duda que el escenario político que se va a dar después de los comicios autonómicos y municipales del próximo 24 de mayo será diametralmente distinto al de la pasada legislatura ya que, con la presumible extinción del bipartidismo y la proliferación de nuevas formaciones con claras opciones electorales, las cábalas para conformar gobiernos estables ofrecerán múltiples combinaciones en buena parte las instituciones.
Ante ese complicado y a la vez sugerente rompecabezas, el actual concejal de Urbanismo y candidato del PSOE a la Alcaldía de Santa Cruz de Tenerife, José Ángel Martín, asegura que las piezas que mejor encajarían para conformar un equipo de gobierno de garantías en el municipio capitalino serían las que representan a todas las fuerzas de izquierda. Otra cosa es que estos partidos estén dispuestos a seguir esa misma hoja de ruta.
Enero es siempre un mes de transición que bascula entre el análisis de lo que ha sido el ejercicio anterior y el inicio de nuevos proyectos. Teniendo en cuenta que 2015 es un año electoral, toca además recapitular en torno al conjunto del mandato y marcarse objetivos a más largo plazo. Empecemos por el balance de esta legislaura.
Ante todo, he de resaltar que, en estos cuatro años, el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha intentado ser el gobierno de las personas y, prueba de ello, es que hemos ido a contracorriente con respecto a otras instituciones. En este caso, no solo me refiero al Ejecutivo central, sino también al autonómico, ya que, mientras éstos recortaban todas las partidas para los servicios y las ayudas sociales, nosotros las hemos ido incrementando a razón de un millón de euros al año.
Y, al margen de esto, ¿qué otros logros considera que ha tenido la gestión del equipo de gobierno municipal en este periodo?
Creo que lo más destacable es que le hemos conseguido dar la vuelta a los temas más conflictivos de la ciudad y encontrar soluciones a cuestiones como el Plan General de Ordenación, ya que, lejos de la polémica que se produjo el pasado mandato, hoy se están solventando muchos de los reparos que rodearon a ese plan. A esto se le suma la aprobación definitiva del Plan Especial del Puerto, que estuvo bloqueado durante 14 años y no había manera de sacarlo adelante, y otros planes como el del Toscal, que también ha sido aprobado inicialmente y ahora está en fase de aprobación definitiva. En definitiva, todos estos temas que en su momento paralizaron Santa Cruz se han ido resolviendo uno a uno.
Por otro lado, me gustaría hacer hincapié en el asunto de Emmasa, donde Sacyr (la concesionaria del servicio municipal de aguas en Santa Cruz) prácticamente campaba a sus anchas y le hemos apretado las clavijas a través de una auditoría de gestión, a raíz de la cual surge la intervención y, ahora, estamos a la espera de los resultados de esta actuación para saber qué es lo que vamos hacer con el servicio público del agua.
¿Y en qué cree que va a quedar todo este asunto de Emmasa?
Aún está por determinar, pero lo cierto es que un tema que parecía que estaba definitivamente en manos privadas es posible que se pueda recuperar para la gestión pública. Más allá de eso, lo que queremos es conseguir una gestión que sea cercana al ciudadano y no con los inadecuados criterios mercantilistas que estaba aplicando Sacyr. Debo recordar que, en su día, el PSOE se posicionó en contra de la privatización porque se trata de un servicio escencial. Sin embargo, hoy lo que defendemos es que Sacyr no pueda hacer lo que quiera; que la concesión hay que cumplirla, que hay un pliego que prohíbe desde las subcontrataciones hasta 60 cosas más y, si realmente ha incumplido y está haciendo cosas que no puede, tendrá que dejar de hacerlas o si no recuperaremos el servicio.
Aparte de esta batería de asuntos que ha enumerado, ¿qué cuestiones de las que habría querido sacar adelante se van a quedar pendientes?
En realidad, me hubiera gustado culminar algún planeamiento al que por falta de tiempo no vamos a llegar como el del Antiguo Santa Cruz y los hoteles, del que sí veremos su aprobación inicial en este mandato, pero no la definitiva. Igualmente, me hubiera gustado acabar la vía litoral, me encantaría haber podido ver la playa de Valleseco terminada y ver también la playa de Las Teresitas con un proyecto que la dignificara y nos permitiera recuperar la bandera azul.
Bueno, de Las Teresitas hay muchas otras cosas pendientes...
Sí, es cierto, pero se ha avanzado en muchas cuestiones. Así, hemos iniciado el pleito para recuperar el dinero de la compraventa que fue declarada ilegal por el Tribunal Supremo en el 2007. En Las Huertas, que es el otro ámbito importante de Las Teresitas, la Junta de Compensación ha sido convocada y se le ha dado audiencia a aquellas personas a las que, en su momento, no se les permitió defender sus derechos sobre la propiedad que tenían en esos terrenos y, por otra parte, también hemos iniciado un proyecto de playa participativa donde se les pregunta a los vecinos para saber cuál es la playa que queremos.
Seguro que habrá más asuntos que se quedarán en el tintero y no sólo por cuestión de tiempo
Por supuesto, lógicamente me hubiera gustado haber tenido una mayor capacidad inversora sobre todo para dotaciones y espacios públicos en los barrios, pero son cuestiones que podremos seguir desarrollando en los próximos años.
Será esa entonces una de las líneas a incluir en el programa electoral que defenderá como candidato del PSOE a la Alcaldía de Santa Cruz. ¿Cuál va a ser su apuesta principal para los próximos cuatro años?
Tal y como yo entiendo, la apuesta para los próximos años no debe estar basada en obras faraónicas sino incidir en las dotaciones de los barrios, porque nuestra prioridad siguen siendo las personas. Así pues, también debemos culminar ese giro de 180 grados que le hemos dado al IMAS (Instituto Municipal de Atención Social) y a la Sociedad de Desarrollo, que son dos herramientas muy importantes para atender las demandas sociales de nuestros ciudadanos y dar respuesta a la necesidad de empleo que tiene el municipio.
Cambiando un poco de tercio ¿Cómo ha resultado la legislatura en lo que respecta a la relación con sus socios de gobierno?
Debo reconocer que ha sido un pacto que ha funcionado francamente bien, a pesar de las discrepancias que hemos tenido y que hemos sabido resolver entre los dos partidos (CC y PSOE). Teníamos claro que lo que necesitaba Santa Cruz era estabilidad y se la hemos dado. Eso sí, no a cualquier precio, ya que había unas líneas maestras que nos marcamos en el pacto de gobierno y que hemos ido desarrollándo poco a poco. Bajo esta premisa, hemos logrado que la conflictividad que existió en Santa Cruz haya aflojando mucho. Insto a los ciudadanos a que tiren de hemeroteca para que miren lo que pasaba en Santa Cruz en mayo de 2011 y lo que pasa ahora y comprobarán que son fotografias totalemte opuestas.
No obstante, no todo han sido tan fácil en este 'matrimonio'. Si tuviera que recriminarle algo a sus compañeros de CC ¿qué sería?
En ese caso, que ya se ha producido en diversas ocasiones, se lo haría directamente a ellos y no públicamente.
De cara a las próximas elecciones municipales se prevé un cambio radical en la configuración de los Ayuntamientos, a tenor de la presumible irrupción de nuevas fuerzas ¿Cómo se plantea ese escenario?
Al contrario de lo que ha pasado en muchas administraciones públicas locales en Canarias, el Ayuntamiento de Santa Cruz siempre ha estado muy fraccionado, con la presencia de cinco o seis fuerzas políticas. Así que estoy muy acostumbrado a la convivencia con otros partidos más allá de los tradicionales. Veo esta situación con optimismo. Que haya más opciones políticas e ideas con las que se pueda pactar redunda en algo muy positivo para el ciudadano. Esto es parte de la democracia y, por tanto, ya veremos lo que sucede tras las elecciones. La única duda que puede existir es si, en general, somos lo suficientemente maduros para saber darle estabilidad a las administraciones a la hora de gobernarlas. No obstante, yo estoy convencido de que España está en un momento en el que puede afrontar perfectamente pactos que nunca se han dado.
Lo que sí parece claro es que con la automización del voto va a ser muy difícil que se produzcan mayorías absolutas y, por tanto, en la inmensa mayoría de los casos habrá que sacar la calculadora para configurar equipos de gobierno estables...
Eso nunca se sabe. Tomemos como ejemplo a la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, que en los últimos tiempos ha pasado de una mayoría absoluta del PP, a una mayoría absoluta del PSOE y otra vez del PP.
Pero eso era antes del auge de los nuevos movimientos sociales y la entrada en la política de otras fuerzas vinculadas a estos colectivos...
Los movimientos sociales siempre han existido y no siempre se ha visto reflejados en el voto. Aún así, la grandeza de la democracia permite que se puedan dar resultados sorprendentes. Ya veremos lo que pasa.
¿Qué opinión le merece el proceso de convergencia de la izquierda y, sobre todo, que se excluya al PSOE de este proyecto?
Me parece un gravísimo error que se pretenda un proceso de convergencia de la izquierda en el que se deje al PSOE al margen. Es iniciar un proceso quitando a la fuerza mayoritaria de izquierda que hay en España. Esto se suma a todos los errores que históricamente ha cometido la izquierda en este país que nos ha llevado al grado de fraccionamiento que tenemos ahora mismo. De hecho, la izquierda va a seguir fraccionada si no hay una voluntad de unificarla. Sin embargo, a la postre tiene cierta lógica porque dentro de la izquierda hay pensamientos muy diversos que no siempre tienen por qué confluir.
Entonces, ¿cuáles son los socios naturales para el PSOE en el Ayuntamiento de Santa Cruz?
Los socios naturales del PSOE deben ser las fuerzas de izquierda como norma general. No es nada que se deba ocultar. Somos una fuerza progresista y eso siempre lo llevamos por delante.
Y ahora que a CC se le acusa, hasta desde dentro de su propia organización, de haber dado giro a la derecha ¿no sería más factible que reeditara el pacto de la anterior legislatura con el PP?
Eso quien lo debe responder es la propia Coalición Canaria. Ellos son los que marcan su deriva política y yo no estoy en ese partido como para responder a esa pregunta.
Pero, ¿como socio de gobierno ha precibido alguna inclinación hacia las políticas más liberales en estos últimos tiempos?
Yo como socio de gobierno en Santa Cruz lo que percibo es que se está cumpliendo el pacto que formalizamos en su día; un pacto donde se trataban temas muy difíciles para Santa Cruz y donde hemos cambiado el rumbo que se estaba siguiendo hasta ese momento. Y como socialistas hemos tratado de dejar nuestra impronta de fuerzas de izquierdas en el gobierno de capitalino.
Y si el 'tetris postelectoral' no deja otra opción para gobernar, ¿plantearía recurrir al pacto entre PSOE y el PP que ya se ha dado en otras instituciones?
Hoy por hoy, esa situación en Santa Cruz me parece imposible.
¿Y después del 24 de mayo?
También imposible. Ya que no se puede gobernar con alguien que piensa diametralmente distinto a ti. Si eso se produjera, teniendo en cuenta la gran distancia ideológica que existe entre ambos, se estaría produciendo un gran engaño al ciudadano. Tal vez, la respuesta más facil habría sido dejar una puerta abierta o una duda en el aire, pero no se puede mentir. Este esquema, al menos en el ámbito que yo conozco, que es el de Santa Cruz, sería un fraude al ciudadano porque el PSOE y el PP representan cosas opuestas y, por tanto, intentar llegar a un acuerdo no es nada factible.