La Cueva del Viento, en Tenerife, ha recibido en el primer semestre del año la visita de 12.380 personas, lo que supone un 87% de ocupación respecto al total de plazas ofertadas.
Solo la cifra de visitantes de los primeros seis meses de 2022 casi alcanza a la de todo el año pasado (12.499 personas), ha precisado el Cabildo de Tenerife este viernes en un comunicado.
De enero a junio se ofertaron un total de 947 rutas guiadas en cuatro idiomas, de las que 458 se realizaron en español, 271 en inglés, 156 en alemán y 34 en francés.
A estas hay que añadir otras 28 visitas de grupos y estudiantes y turistas coordinadas por turoperadores.
Ubicada en el término municipal de Icod de los Vinos, la Cueva del Viento es el tubo volcánico más largo de Europa y sexto del mundo. Originado por las coladas del Pico Viejo, situado junto al Teide, se formó hace 27.000 años y su nombre se debe a las importantes corrientes de aire que se producen en su interior.
Se trata de un lugar único porque sus galerías se extienden en tres niveles superpuestos, cuenta con numerosas ramificaciones aún sin explorar y presenta una gran variedad de estructuras de origen primario como gotas de lava, cascadas lávicas, terrazas laterales o lagos de lava.
A su belleza física se une un alto valor ecológico, científico y arqueológico, por tratarse del hogar de especies únicas, como la cucaracha sin ojos loboptera subterránea, y albergar restos de enterramientos guanches y fósiles de vertebrados ya extinguidos en la isla como la hubara o la rata y el lagarto gigantes.