La isla de Tenerife está saturada de población y de coches. Así lo ha manifestado el ingeniero de Caminos, Canales y Puertos Rufino García, quien ha lanzado una advertencia sobre esta circunstancia en la isla y ha llamado a la reflexión.
En un ciclo sobre movilidad, transporte y descarbonización organizado por la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Tenerife, en colaboración con la Fundación Cultural Canaria Betancourt y Molina, ha subrayado que en la isla hay 1.500 kilómetros de carreteras y más de medio millón de turismos. “Si nos diera un día a todos por salir a la calle al mismo tiempo, estaríamos en el atasco perfecto”, ha advertido este experto, quien ha alertado también sobre el peligro que supone un crecimiento desmesurado en territorio.
Ha subrayado que en Tenerife la densidad de población “solo de residentes” es de 451 habitantes por kilómetro cuadrado, y si se incluye a los turistas, supera los 500. Pero si además se tiene en cuenta que el 45% del territorio insular está protegido, la densidad de población en el 55% “suelo útil” se acerca a los 1.000 habitantes por kilómetro.
De ahí que invite a “pararnos a pensar y reflexionar para poder planificar, programar y ejecutar con criterios objetivos no solo la isla que queremos, sino la que podemos”.
Rufino García ha puesto el ejemplo de Mallorca, donde, con una tasa de 244 residentes por kilómetro cuadrado, se está debatiendo “desde hace tiempo” esta cuestión. Japón, considerado uno de los países más poblados del mundo, tiene 334 residentes por kilómetro cuadrado.
Movilidad limitada
Sobre las infraestructuras de movilidad, este experto ha recordado que el Plan Insular de Ordenación de Tenerife (PIOT), aprobado hace más de 10 años, plantea una red viaria estructurada y jerarquizada en tres niveles.
La de nivel básico de alta capacidad, conocida como Anillo Insular, es la red que debe garantizar los desplazamientos interurbanos.
“Sin embargo, tal anillo sigue sin cerrarse y, por consiguiente, no está en condiciones de asumir las funciones que el Plan le asigna”, ha aseverado.
Para cerrar el Anillo Insular aún están pendientes de ejecutar la circunvalación del Área Metropolitana, el tramo Los Realejos-Icod y, en el Sur, la variante de la ciudad turística, mientras que el tramo Santiago del Teide-El Tanque se está ejecutando.
Además, ha explicado que el trazado desde La Florida, en La Guancha, hasta El Tanque no puede ser considerado una vía de alta capacidad, porque solo cuenta con dos carriles y otro tanto ocurre desde el barranco de Erques, en Adeje, hasta Santiago del Teide, y el ramal de Fonsalía.
Ha detallado que el PIOT también prevé las redes comarcales de segundo nivel, que, por lo general, se corresponden con las carreteras viejas de la isla en medianías, y otras muchas de nuevo trazado que nunca han llegado a ver la luz.
El modelo que planificó el PIOT, ha explicado, también proponía muchas otras cuestiones para mejorar la movilidad, luego “estaba hecha la receta”. El problema es que esta “nunca llegó a la farmacia, es decir, no pasó de la gaveta de alguien”.
Según García, uno de los problemas de la movilidad en la isla es que “se carece de una autoridad única que gestione de forma coherente la movilidad a nivel insular, porque, si se pretende ordenarla y un alcalde dice que deja aparcar a todo el mundo en la calle y encima de las aceras, no hay manera de lograrlo”.
Sobre este asunto, ha afirmado que la gestión de los aparcamientos es una de las herramientas básicas para afrontar el problema.
García ha recordado que, en su momento, se hizo un documento para la plataforma logística puerto-aeropuerto del Sur, que preveía hasta tres alternativas de enlace para el Reina Sofía, pero fue anulado por el Tribunal Supremo.
Sin embargo, ha hecho hincapié en que el aeropuerto, que es “una entidad estratégica”, tiene un solo enlace con la TF-1, por lo que “corre el riesgo de quedarse incomunicado”.
También ha citado el caso del proyecto de la variante de la ciudad turística del Sur, que fue aprobado en el Plan Director de Infraestructuras de Canarias en abril de 1999, y “no se ha hecho ni una raya”.
Igual ocurre con el tercer carril de la TF-1 entre San Isidro-Las Américas, que tiene el proyecto de trazado aprobado desde 2009 y aún carece de proyecto de construcción.
Asimismo, ha apuntado que el sistema viario del área metropolitana, que recoge “absolutamente todo lo que hay que hacer”, está aprobado por el Cabildo en 2006, pero, en un momento dado, alguien dijo “ahora no me gusta” y se paralizó.
Ha puesto el foco en que hay dos secciones de las carreteras de Tenerife que soportan más de 100.000 vehículos al día. Una es el Área Metropolitana y otra la zona de la Ciudad Turística del Sur. Esto supone que de media 130.000 personas circulan por ahí a diario. “Si lográramos que en cada coche viajaran dos pasajeros, la cifra de vehículos sería 65.000, una cifra que sería manejable. Solo con ese hecho disminuiríamos el 35% de la demanda de movilidad motorizada”, ha asegurado.