El sindicato de enfermería SATSE ha calificado este miércoles de “crítica e insostenible” la situación del personal del servicio de Urgencias del Hospital Universitario de Canarias (HUC), en Tenerife.
Las enfermeras y enfermeros del servicio de urgencias están “agotados, debido a la presión constante y a las condiciones inadecuadas en las que tienen que trabajar, o que pone en serio riesgo su salud física y mental, así como su capacidad para proporcionar los cuidados necesarios a los pacientes”, ha alertado el sindicato en un comunicado.
SASTE ha denunciado la reubicación de pacientes en la sala de espera de familiares de la UVI y que se está utilizando la antigua sala de observación psiquiátrica de urgencias para dejar a pacientes que llegan al servicio, muchos de ellos en camillas de ambulancias, sin el correspondiente triaje.
Este triaje, ha continuado SATSW, lo lleva a cabo personal no sanitario que, aunque realiza una labor esencial, no está cualificado para proporcionar la atención que estos pacientes requieren, ha criticado.
Según el sindicato, este tipo de medidas no solo compromete la seguridad y el bienestar de los pacientes, sino que también está generando una sobrecarga laboral considerable para las enfermeras del triaje, que se deben hacer cargo de la supervisión de estos pacientes, una tarea que se suma al resto de sus exigentes responsabilidades.
La organización sindical entiende que existen dificultades estructurales para la correcta ubicación de los pacientes en el servicio de urgencias.
Sin embargo, “no podemos aceptar que las soluciones a estos problemas recaigan en las enfermeras, incrementando de manera insostenible su carga laboral y afectando la calidad de los cuidados que desean proporcionar”, han añadido.
Por este motivo, SATSE exige el cese inmediato del uso de la sala de observación de urgencias como espacio de reubicación de pacientes bajo la supervisión exclusiva de personal no sanitario.
Asimismo, pide que se aumente el personal de enfermería en las áreas críticas, para asegurar una atención adecuada y segura a los pacientes.
Para SATSE es necesario garantizar, tanto la seguridad de los pacientes, como la de los profesionales de enfermería, quienes ya no pueden soportar una carga de trabajo tan extrema.
“El personal está al límite de sus capacidades, lo que afecta negativamente tanto a su bienestar como a la calidad asistencial”, ha añadido en la nota.