El exmagistrado de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha acusado este lunes al Tribunal Supremo de haber maniobrado contra la juez y exdiputada de Podemos por Las Palmas, Victoria Rosell, mediante la querella que contra ella presentó en febrero el ex ministro de Industria José Manuel Soria.
Garzón, en el transcurso del Foro Premium del Atlántico, del periódico Diario de Avisos, consideró que el Alto Tribunal “admitió a trámite” la denuncia por retardo malicioso en la administración de justicia, prevaricación y cohecho “sabiendo que luego no” iba a tener recorrido y “con el tiempo justo para que (Rosell) no se pudiera presentar” a los segundos comicios, informa Europa Press.
Sobre el caso y denuncias cruzadas que implican a Rosell, al empresario Miguel Ángel Ramírez y al juez Salvador Alba -con grabaciones de por medio realizadas por el empresario, dueño del grupo Ralons, a Alba-, Garzón ve “legítimo” que éste adoptara esa precaución.
“Me parece legítimo que el empresario lo hiciera, por si lo que se le planteaba no era lícito. Eso está claramente protegido, es tu intimidad”, mantuvo.
Para Garzón, determinar si lo escuchado en esas grabaciones es un “posible ilícito” es algo de “calificación más compleja”. “Sin saber más datos creo que esa grabación era una especie de salvamento de sí mismo [para Ramírez]”, sostuvo.
En cambio, el exjuez cree que “quien tendría que responder” a si eso es ilícito “es quien hiciera las propuestas”. “Si ocurrió tendrían que depurarse responsabilidades”, sentenció.
Garrido comparte la “perturbación” ciudadana por el caso Alba
El fiscal superior de Canarias, Vicente Garrido, ha confesado que comparte “la perturbación de la ciudadanía” respecto a las conversaciones que el juez Salvador Alba mantuvo con el empresario Miguel Ángel Ramírez para elaborar un montaje judicial contra la juez y ex diputada de Podemos Victoria Rosell que la apartó de la carrera política que había iniciado.
Garrido, que ha presentado la memoria a la presidenta del Parlamento de Canarias, Carolina Darias, ha recordado que él mismo participa como fiscal en la causa penal abierta contra el juez Alba, pero apeló al “Estado de Derecho” para garantizar que esta causa “será objeto de análisis y valoración” por parte del Tribunal Superior de Justicia de Canarias.
El fiscal jefe ha insistido que no solo en este caso concreto, sino en todos los que tienen que ver con la corrupción, su departamento mantiene una “honda preocupación”, motivo por el que “ponemos todos los medios a nuestro alcance para perseguirla”, toda vez que los mismos generan desconfianza hacia las instituciones por parte de la ciudadanía.
Hasta ahora la única iniciativa tomada por Garrido en la causa del juez Salvador Alba ha sido oponerse a la personación de Victoria Rosell por no considerarla ni perjudicada ni víctima.