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Condenado a seis años de prisión el bodeguero canario que cobraba el paro y aparecía en la 'lista Falciani'

Efe/ Canarias Ahora

Las Palmas de Gran Canaria —

La Audiencia de Madrid ha condenado a seis años de prisión y a una multa superior a los 11 millones de euros al empresario jubilado Sixto Delgado Coba, uno de los españoles que aparecían en la lista Falciani, un documento que -según los jueces- llegó legalmente a las autoridades fiscales españolas.

La Audiencia condena al empresario por dos delitos contra la Hacienda Pública cometidos en los años 2005 y 2006, períodos en los que habría defraudado 2,8 millones de euros.

Cabe recordar que Delgado de la Coba, ingeniero industrial retirado nacido en Las Palmas de Gran Canaria en 1944, había trabajado para la petrolera Repsol, empresa que dejó en el año 2000 tras haber estado 30 años en la multinacional. Tras dejar este empleo estuvo cobrando dos años el paro y en el año 2006 su hija le contrató en un negocio de turismo rural, en el que se jubiló en marzo de 2009.

Los jueces rechazan la pretensión del acusado de que el proceso fuese anulado por la exclusión de la prueba de la que partía, la lista Falciani sobre los titulares de cuentas en el HSBC de Ginebra (Suiza), entre los que se encontraba el acusado, al considerar que el origen de la misma es ilegal.

El tribunal desestima esa petición -que se apoyaba en la doctrina del árbol envenenado que establece que la nulidad de la prueba base invalida todo el proceso- al entender que los documentos llegaron a España al amparo de la normativa internacional, es decir, entregadas por las autoridades francesas a las españolas, sin que se rompiera la cadena de custodia.

La Audiencia toma esa decisión de acuerdo con el criterio del fiscal y del abogado del Estado -que pedían para el acusado ocho años de prisión- y de resoluciones judiciales previas.

Una vez rechazada esa petición, los jueces consideran probado que el acusado -un ingeniero industrial canario jubilado en el año 2000- utilizaba tres sociedades pantalla para ocultar sus activos.

El procesado declaró ingresos de 15.054,89 euros en 2005 y 41.297,54 euros en 2006, debiendo ingresar a Hacienda 722,28 euros en el primer caso y 3.460,20 en el segundo.

Pero al tiempo era titular, individualmente o con otras personas, de varias cuentas en el HSBC en Suiza cuyo único objetivo era mantener sus fondos ocultos al fisco. Su saldo conjunto era de 4,9 millones de euros a finales de 2005 y de 5,2 millones a finales de 2006.

La Audiencia recalca que Sixto Delgado jamás declaró ese dinero ni pagó impuestos por ello, ni en España ni en Suiza.

Según la Agencia Tributaria, el acusado debería haber pagado 2,2 millones de euros correspondientes al año 2005 y 576.811 euros al año 2006.

Por ello, además de la pena de prisión, la Audiencia de Madrid condena al procesado al pago de una multa del cuádruplo de la cantidad defraudada, es decir 11,3 millones de euros.