Doble varapalo para el juez Salvador Alba en su primera escaramuza para esquivar las imputaciones que se ciernen sobre él tras conocerse una grabación en la que aparentemente maquinó contra la exdiputada de Podemos por Las Palmas y también magistrada Victoria Rosell. El Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) y el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) han rechazado de plano las quejas presentadas por Alba contra la jueza Carla Vallejo, su sustituta en el Juzgado de Instrucción número 8 de Las Palmas de Gran Canaria, después de que ésta enviara a la Sala de lo Penal del TSJC una exposición razonada para su imputación tras conocerse la grabación presentada por el empresario Miguel Ángel Ramírez.
Ni el TSJC ni el Poder Judicial aprecian motivos para abrir expedientes contra Vallejo, en el primer caso por no quedar probada la amistad íntima alegada por el denunciante, y en el segundo, por no encontrar nada que pudiera sustentar mínimamente tal acción disciplinaria, ni siquiera esa supuesta amistad alegada por el demandante.
Según adelanta Canarias7, y ha confirmado a este periódico el gabinete de comunicación del TSJC, el presidente del TSJC, Antonio Doreste, ha desestimado la queja del magistrado en la que acusaba a Vallejo de una falta de inobservancia del deber de abstención, al asumir la investigación de la causa por presunto delito fiscal contra Ramírez y aceptar la grabación a pesar de su supuesta amistad íntima con Rosell.
Así, la única prueba presentada por Alba para probar la amistad íntima de Rosell y Vallejo fue una fotografía obtenida en Twitter en la que se veía a las dos magistradas con un grupo de juezas conformado, entre otras profesionales de la Magistratura, por la juez de la Sala de lo Social del TSJC Gloria Poyatos y la vocal del Consejo General del Poder Judicial Ángeles Carmona, a quien Alba confundió con la parlamentaria de Podemos Noemí Santana. Esta fotografía fue reproducida con el mismo error de identidad por el periódico La Provincia.
El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha desestimado la otra queja presentada ante el órgano de gobierno de los jueces con los mismos argumentos. El promotor de la acción disciplinaria del Consejo entiende que no hay ninguna causa para dudar de la imparcialidad de Vallejo, ni siquiera la de la supuesta amistad íntima, dado que Rosell no es parte en ninguno de los procedimientos que se instruyen en aquel juzgado, incluidas las diligencias por las que se investiga a Ramírez.
El magistrado Salvador Alba, adscrito a la Sección VI de la Audiencia Provincial de Las Palmas, tiene abiertas diligencias penales en el TSJC después de que la Fiscalía Provincial de Las Palmas apreciara al menos un delito de negociaciones prohibidas a funcionario público y la jueza Vallejo añadiera el de prevaricación a la exposición razonada que envió al más alto tribunal canario, sin que puedan descartarse otros ilíticos como el de falsedad en documento judicial.
Esas imputaciones provienen de la grabación aportada por el empresario Miguel Ángel Ramírez de las que se deduce que el magistrado le ofrece archivarle un procedimiento por fraude fiscal y a la Seguridad Social a cambio de datos que pudieran comprometer la carrera de la magistrada Victoria Rosell.
La primera reacción de Alba tras hacerse pública la existencia de esa grabación y ser difundida por eldiario.es fue la de denunciar a Miguel Ángel Ramírez y al abogado Sergio Armario, que supuestamente concertó la cita objeto de la conversación registrada. Esa denuncia se tramita en estos momentos en el juzgado de Instrucción número 2 de Las Palmas de Gran Canaria, al que ya han sido citados a declarar el denunciante (para que se ratifique en la denuncia), el empresario y el abogado.
También habrán de comparecer el jefe de Seguridad de la Ciudad de la Justicia y los tres vigilantes de seguridad que acompañaron a Ramírez hasta el despacho de Salvador Alba a través del circuito restringido del edificio expresamente a petición del magistrado, como adelantó Canarias Ahora.
Paralelamente, Alba reaccionó denunciando a su sustituta, Carla Vallejo, ante el TSJC y el CGPJ con el fin de apartarla de Instrucción 8 por una supuesta amistad íntima con la magistrada Rosell. La primera respuesta de los órganos jurisdiccionales ha sido el archivo de plano.