De la Rama al Charco: dos meses de fiestas populares en la isla de Gran Canaria

Al igual que sucede en otros puntos de España, los meses de agosto y septiembre concentran una gran parte de las fiestas populares que se celebran en toda la geografía de la isla de Gran Canaria. Viajar Ahora te propone un calendario festivo con algunas de las fiestas más curiosas y representativas de la isla. No están todas las que son; esta selección de diez eventos se ha realizado con criterios puramente subjetivos señalando fiestas, romerías y actos que, por su carácter, forman parte de los atractivos turísticos de la isla.

La Rama de Agaete (4 de agosto).- Para muchos, la Fiesta de La Rama, que se celebra cada 4 de agosto en la localidad norteña de Agaete, es la madre de todas las fiestas populares que se celebran ya no sólo en Gran Canaria, sino en toda Canarias. El baile de La Rama es una procesión ‘profana’ que recorre las calles de este pueblo hasta las orillas del Puerto de Las Nieves al son incansable de la música y blandiendo ramas verdes que convierten al pueblo en un auténtico bosque en movimiento. Para algunos es una de las últimas fiestas de raigambre aborigen que aún quedan, y para otros sólo una manera curiosa de celebrar las Fiestas en honor de Nuestra Señora de las Nieves que deriva de la costumbre de adornar las iglesias con ramas verdes durante las fiestas patronales. En todo caso, se trata de una fiesta impresionante con una carga antropológica y sentimental impresionante. Para no perdérsela.

La traída del agua de Lomo Magullo (Domingo, 9 de agosto).- Esta fiesta popular que se celebra en el barrio teldense de Lomo Magullo es uno de los eventos festivos más populares y multitudinarios de la isla de Gran Canaria que, aunque de reciente creación (se celebra desde hace unos 40 años) hace referencia a la tradición de ir a por agua a las fuentes y acequias del interior de la isla, una necesidad que hasta hace escasas décadas no se superó con la generalización de las redes de agua potable en toda la isla. La Traída del Agua es una de las fiestas más queridas de los grancanarios. La tradicional romería se convierte en un chapuzón colectivo cuando los presentes se arrojan baldazos de agua.

Los Fuegos de San Lorenzo (9 de agosto).- Este bonito barrio rural de Las Palmas de Gran Canaria celebra las fiestas de su patrón con un espectacular castillo de voladores (fuegos artificiales) que atrae a miles de visitantes de toda la isla. Un día antes (el 8 de agosto) se realiza la tradicional romería en honor del santo.

Fiestas de la Cuevita de Artenara (23 de agosto).- La Romería de la Virgen de La Cuevita es sólo el punto culminante del programa de fiestas del municipio cumbrero de Artenara. Durante este día, se celebra uno de los festivales de música popular canaria más importantes del Archipiélago canario. Una de las particularidades de esta romería es que las ofrendas son de carácter musical. La virgen de La Cuevita es la patrona del folclore canario.

La Varada del Pescado de Arinaga (Último viernes de agosto).- Es una fiesta relativamente joven (se celebra desde 1995) pero rinde homenaje a una de las actividades tradicionales más importantes de Canarias, la pesca. Durante la jornada, miles de personas acuden a la localidad costera de Arinaga, en el sureste de la isla, para participar de una fiesta en la que el protagonista absoluto es el pescado. Durante esta romería, que se celebra siempre el último viernes del mes de agosto, se asan más de 600 kilos de pescado fresco. La música folclórica protagoniza la jornada festiva hasta que, al caer la noche, se celebra una multitudinaria verbena.

Romería de Nuestra Señora del Pino en Teror (7 de septiembre).- La patrona de la isla cuenta con la romería más multitudinaria de la isla. Durante la tarde del 7 de septiembre delegaciones de todos los municipios de la isla desfilan por las calles aledañas a la impresionante Basílica del Pino para rendir homenaje a la virgen. La entrega de productos locales se alterna con actuaciones de agrupaciones folclóricas de todas las islas. Esta romería sólo es uno de los numerosos actos de un calendario festivo que se prolonga durante varias semanas. Durante la madrugada del 7 al 8 de septiembre, miles de grancanarios acuden a pie hasta la Villa Mariana desde los más diversos pueblos y ciudades de la isla para llegar a Teror el día ocho, día grande de las fiestas.

El Charco de La Aldea (11 de septiembre).- Junto a La Rama, la fiesta del Charco es una de las escasas reminiscencias de las fiestas que se celebraban en la isla antes de la llegada de los conquistadores europeos. La celebración rememora la práctica del embarbascado, una técnica de pesca que utilizaba charcones artificiales para atrapar el pescado. El punto álgido de la fiesta se produce cuando miles de personas se lanzan a un enorme charcón de mar para pescar a mano. Es una de las fiestas más divertidas del calendario veraniego grancanario.

Bajada del Gofio y del agua de Agüimes (último sábado de septiembre).- Esta fiesta rinde homenaje a la enorme tradición molinera de esta localidad del este grancanario. Durante la tarde del último sábado del mes de septiembre, los agüimenses bajan hasta las inmediaciones del Barranco de Guayadeque (hasta los molinos de agua de Lolita y Ananías) para traer el gofio hasta el centro de la localidad. Por el camino se declara una auténtica guerra de gofio y agua. Al llegar a la plaza, los vecinos lanzan cubos de agua desde las ventanas de las casas para ‘lavar al personal’ y dar por finalizada la fiesta hasta el comienzo de la verbena.

Suelta del Perro Maldito en Valsequillo (29 de septiembre).- A la media noche las fuerzas del mal, con el mismísimo demonio a la cabeza, toman el tranquilo pueblo de Valsequillo. La suelta del perro maldito (a las 0.00 horas del 29 de septiembre) es uno de los actos principales de las fiestas en honor de San Miguel Arcángel. Los vecinos del pueblo protagonizan un espectacular pasacalles teatralizado que representa la lucha entre las fuerzas del bien y del mal.

Romería del Rosario de Vegueta (Sábado anterior al Día del Rosario -7 de octubre-) Es una de las pocas romerías tradicionales que se celebran en Las Palmas de Gran Canaria (en su barrio histórico para más señas). También es una especie de final no oficial del verano aunque por estas fechas se puede disfrutar de los mejores días de playa en la capital. Las carretas, la indumentaria tradicional y la música popular son las protagonistas de esta bonita romería que recorre el corazón de la capital.