La Asociación Cántabra de Empresas de Nuevas Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (Ascentic) ha confirmado este jueves a Jaime Gómez Obregón como nuevo presidente de un colectivo que está integrado por una treintena de compañías, que generan en estos momentos más de 1.200 puestos de trabajo. El fundador de ITEISA, que sustituye en el cargo a Pedro Bárcena, ha recibido el testigo en la clausura de la asamblea anual en la que ha participado el presidente autonómico, Ignacio Diego.
En una entrevista concedida a eldiario.es Cantabria, el nuevo presidente de Ascentic ha reconocido que está “muy ilusionado” porque hay gente a la que valora mucho y que “son un ejemplo” como empresarios que le han animado a liderar el colectivo. Una organización que, en opinión de Gómez Obregón, reúne una serie de características que la hacen especial.
“Es una asociación singular, porque prácticamente todo se hace por consenso. Incluso, en lo que respecta a las elecciones. Aquí todas las opiniones valen lo mismo. Además, nuestra estructura financiera se basa en las aportaciones de los socios y de los servicios profesionales que prestamos. Nunca hemos estado subvencionados ni hemos necesitado de fondos públicos para nuestro sostenimiento”, señala.
Eso es un valor que dota a Ascentic de una independencia y de una sostenibilidad que está muy lejos de lo que pasa en otras asociaciones profesionales de la comunidad autónoma. “Por ejemplo, no tenemos una sede social física, porque entendemos que es un coste que no aportaría nada a nuestros asociados. Cuando necesitamos reunirnos, lo hacemos de forma itinerante por las empresas, que hay sitio de sobra”, insiste.
En esta línea de diferenciación, también pone en valor que sea “un instrumento” para el desarrollo empresarial, lejos de luchas de poder o influencias políticas. “El primer objetivo es el retorno a los asociados. Las empresas que fundaron Ascentic estaban enfrentadas en el mercado, competían. Había desconfianza y desconocimiento. Ahora siguen compitiendo y han crecido mucho, pero son capaces de sentarse para construir alternativas o mejorar la organización. El aprendizaje mutuo, la confianza, es muy útil para todos. Podría haber sido otra cosa, un instrumento para captar ayudas o canalizar otros negocios, pero no lo ha sido”, confirma el nuevo dirigente.
Este joven empresario, fundador de una empresa puntera en su sector, ha llegado al cargo después de un intenso trabajo previo, en el que ha mantenido múltiples reuniones para tener “un termómetro” de la situación y diseñar un plan de futuro para Ascentic. Así, entre los retos de futuro señala la ampliación de los servicios a sus socios, el fortalecimiento del colectivo, la mejora de la comunicación interna y externa o la concreción de un clúster tecnológico en Cantabria que aglutine a todo el sector.
Cuestión de responsabilidad
Jaime Gómez Obregón se muestra crítico con la situación que ha vivido en los últimos años CEOE-Cepyme y confiesa que la salida de Ascentic de la Confederación estuvo en el debate. “Siempre hemos tratado de implicarnos para cambiar cosas e influir positivamente. En los últimos tiempos, hemos reflexionado si merece la pena estar dentro. Por una cuestión de responsabilidad, hemos decidido seguir ahí e intentar dar una vuelta a las cosas que no nos gustan”.
Ascentic ha tenido personas en puestos de responsabilidad de una organización que ha trabajado con un modelo que es “prácticamente contrario” al que defienden, con casi dos tercios de los ingresos provenientes de las subvenciones públicas. “La aritmética no salía. Hay que hacer un ajuste muy importante, pero estos cambios son la única manera de que CEOE tenga futuro”, concluye.