Los ayuntamientos cántabros de Valderredible y Campoo de Yuso y el burgalés de Arija se han reunido con la presidenta de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), Dolores Pascual, y su equipo técnico, con la intención de impulsar el puente Norguerol, en el embalse del Ebro.
Las entidades locales han solicitado al Organismo de Cuenca del Ebro, adscrito al Ministerio de Transición Ecológica, la redacción de un proyecto de obra del futuro puente, para saber el coste, y sobre el que poder trabajar y planificar su reconstrucción.
Por su parte, la Confederación del Ebro expuso la necesidad de que, previamente, se elabore un estudio de viabilidad y necesidad, acompañado de un plan director del Valle. Pascual se ha comprometido a visitar la zona para estudiar y analizar el tema.
Según han informado hoy los ayuntamientos en un comunicado, la reunión tuvo lugar el 23 de noviembre con la asistencia del Pascual y de los alcaldes de Arija, Pedro Saiz, y Valderredible, Fernando Fernández, y el concejal de Campoo de Yuso, Antonio Ruiz.
Los alcaldes defendieron la necesidad de finalizar el proyecto del puente del pantano del Ebro, iniciado en la década de 1910 e incompleto. Se trata de la única obra de compensación comprometida por el Estado que se realizó, pero se cayó y sus restos pueden verse cuando baja el nivel del agua.
Los representantes campurrianos expusieron que, igual que se construyó el muro de la presa, el puente Noguerol es “parte inseparable del embalse”, por lo que “la obra del pantano del Ebro no puede darse por concluida sin el puente”, han defendido, así como que se trata de un “compromiso histórico del Gobierno de España”.
La actuación, según los alcaldes, supuso la pérdida de 1.000 puestos de trabajo directos y 2.000 indirectos, así como la inundación de 400 viviendas. Con la caída del puente Noguerol se perdió una vía de unión y comunicación “prioritaria para dinamizar la economía y el turismo en la zona”, han lamentado.