Gema Igual ha empleado casi dos horas de 'monólogo' para reivindicar su labor como alcaldesa de Santander e intentar sacar brillo a su primer año al frente del Consistorio. Lo ha hecho durante el primer debate que se celebra sobre el estado de la ciudad y en un pleno en el que ha quedado patente una vez más esta legislatura la soledad y la falta de liderazgo del PP tras la marcha de Íñigo de la Serna al Ministerio de Fomento.
La alcaldesa, asediada por los escándalos en prácticamente todas las concejalías y rodeada de polémica tras cada nuevo proyecto, ha intentado recuperar la iniciativa política en un formato de debate teledirigido, diseñado para su lucimiento personal y en el que la participación de los grupos de la oposición ha sido casi testimonial.
Y es que el equipo de Gobierno decidió imponer los tiempos de los portavoces del resto de partidos mientras que las intervenciones de Igual eran ilimitadas, lo que ha descafeinado este primer debate de balance, impulsado por el PSOE hace casi dos años, aprobado por unanimidad en 2016 y que el PP ha mantenido en el cajón hasta que ha visto una posibilidad de relanzar el mandato de la alcaldesa.
Sin embargo, y a pesar de ese intento por presentar como exitosa su gestión en el Ayuntamiento, la oposición en pleno -PSOE, PRC, Izquierda Unida, Ganemos, Santander Sí Puede y la edil no adscrita Cora Vielva, es decir, todos salvo el exconcejal de Ciudadanos David González- ha cargado duramente contra Gema Igual, al tiempo que ha coincidido en señalar el “fin de ciclo” de los populares.
Así, en la lista de “escándalos, bochornos y esperpentos” del PP han citado la anulación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), el incendio del MAS, el derrumbe de la calle del Sol, la “cesión ilegal” de trabajadores en Santurban, el cambio de iluminación que “ha dejado a la ciudad en tinieblas” o lo más reciente, la web de turismo mal traducida y la puesta en marcha del Metro-TUS, “generando problemas donde no los había”.
Frente al discurso de avances, reducción de deuda, bajada de impuestos y grandes proyectos para la ciudad al que Igual ha dedicado casi dos horas, toda la oposición menos González -apoyo fundamental para que el PP mantenga la mayoría en el pleno- ha criticado el “caos” de la capital, con proyectos que, a juicio de los portavoces que han intervenido, “no siguen ninguna planificación debido a la falta de modelo y estrategia de futuro desde que se fue el líder y se quedó solo el atrezzo”.
La crispación que viene protagonizando los plenos desde que el PP perdió la mayoría absoluta en 2015, salvada siempre por la intervención de los tránsfugas de Ciudadanos, ha vuelto a hacerse presente en un debate bronco, cargado de reproches, y en el que la alcaldesa ha querido escenificar una oferta de pacto, que ella misma ha contradicho con descalificaciones continuas hacia la oposición, tanto por su parte como por parte del portavoz popular, César Díaz, con acusaciones de “manipulación, oportunismo y demagogia”.
En la línea de las políticas que viene desarrollando el equipo de Gobierno, primero con De la Serna y ahora con Igual, los mayores anuncios han vuelto a tener al hormigón como protagonista, tras el anuncio de que este año se realizarán medio centenar de obras, en las que se van a invertir 108 millones de euros, y en la puesta en marcha de la redacción de un nuevo PGOU, que en el mejor de los casos no estará listo hasta dentro de dos legislaturas, como reconoció el propio concejal de Obras en un pleno reciente.