La gestión de Escenario Santander no cambiará de manos. La Mesa de Contratación abrió este viernes las ofertas presentadas al concurso público que el Ayuntamiento de la capital convocó el pasado mes de octubre, y la propuesta de Delfuego Booking ha obtenido la mayor puntuación.
La adjudicación aún no es definitiva, ya que falta el visto bueno del Servicio de Intervención del Ayuntamiento. Los técnicos municipales tienen que verificar que la propuesta económica de la productora cántabra es viable y que se ajusta al pliego de condiciones. Si es así, como sucede en la inmensa mayoría de los casos, los técnicos emitirán un informe favorable que ratificará la decisión tomada por la Mesa de Contratación. Un trámite que se espera se produzca esta próxima semana.
Así, Escenario Santander seguirá, casi con total seguridad, bajo la dirección de Javier Palacios. Su productora viene gestionando esta instalación desde el año 2012. Delfuego Booking también resultó adjudicataria en la anterior licitación, en la que no tuvo rivales, ya que entonces ninguna otra empresa se presentó al concurso. Esta vez sí ha tenido competencia, y ha estado muy ajustada, según ha podido saber eldiario.es Cantabria.
Las condiciones de la concesión han cambiado respecto a las establecidas hasta el momento. Además de ampliar el periodo de explotación de dos a cuatro años -prorrogable por otro más-, el Ayuntamiento ha incrementado el canon que la empresa debe de abonar. Mientras que en 2012 la cuota se fijó en 6.000 euros anuales, ahora la productora deberá desembolsar un mínimo de 9.000 euros al año.
Durante su primer año de gestión al frente de Escenario Santander, Delfuego Booking organizó 163 conciertos y 70.200 personas participaron en sus actividades, según los datos presentados en rueda de prensa por el concejal de Cultura, César Torrellas, y el director de la productora.
Este espacio musical, que se ubica en el Parque de Las Llamas, fue inaugurado en marzo de 2011. Además de sala de conciertos, cuenta con 15 locales de ensayo, un estudio de grabación profesional y aulas de formación.
El presupuesto de la obra ascendió a cuatro millones de euros financiados íntegramente por el Ayuntamiento a través de la Sociedad de Vivienda y Suelo. Un año después de la inauguración, el equipo de Gobierno, entre las críticas de la oposición por la falta de actividad, decidió privatizar su gestión.