Parece que el final de la semana va descongestionando la sanidad cántabra, o al menos así lo reflejan los últimos datos enviados por el Gobierno correspondientes a la jornada del jueves. De esta forma, el registro establece que en este momento hay 163 personas hospitalizadas, es decir, once menos que en la jornada previa, pero además, también se rebajan los enfermos críticos que están siendo atendidos en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), que pasan de los 33 ingresados a los 31. Ambos datos relajan considerablemente la tasa de ocupación hospitalaria, que cae hasta el 11,11%, y la de la UCI, que alcanza el 26,5%.
Pero como todo no van a ser buenas noticias, una persona más ha fallecido por la COVID-19. Se trata de una mujer de 91 años que se suma ya a la lista de decesos registrados desde el inicio de la pandemia, una lista que este viernes ha alcanzado los 477 fallecimientos. Asimismo, los casos nuevos han vuelto a aumentar y mientras en la jornada del miércoles solo se habían notificado 113 positivos, este jueves el dato se ha incrementado hasta los 136. Esta ligera subida ha traído consigo un crecimiento en el número de personas con la enfermedad, que alcanza los 3.690 casos activos, lo que se traduce en 29 personas más que en la jornada previa. De ellos, además de los 163 hospitalizados, 3.527 personas se encuentran en cuarentena domiciliaria.
Asimismo, la incidencia acumulada a 14 días continúa con su tendencia a la baja y en un solo día ha pasado de los 360 casos por cada 100.000 habitantes, a los 350. Un dato más que esperanzador para que durante los próximos días los hospitales puedan seguir descongestionándose. Por su parte, la tasa de positividad es del 8% (también disminuye un 0,2%), y la incidencia acumulada a 7 días es de 158 con tres puntos menos que el día anterior.
Los acumulados positivos hasta el momento en la comunidad son 24.312 personas de las que 23.087 han sido diagnosticadas mediante PCR y 1.225 a través del test de detección de anticuerpos. Además, se han realizado 424.473 pruebas a la población, lo que equivale a 73.022 test realizados por cada 100.000 habitantes.