El conflicto interno desatado en el PP de Cantabria sigue acaparando buena parte de la atención política y mediática de la comunidad autónoma. La lucha abierta por el control del partido ocupa y preocupa a sus dirigentes y se deja notar en la actividad de su grupo parlamentario.
Varios diputados populares se han ausentado en la sesión matutina del debate presupuestario que tiene lugar este jueves en el Parlamento de Cantabria, donde los socios de Gobierno sacarán adelante las cuentas de 2017 con el apoyo de Ciudadanos. Entre los ausentes, las dos principales caras visibles de esta batalla: Ignacio Diego y María José Sáenz Buruaga. Ambos, compañeros y rivales, han faltado durante buena parte de la mañana.
Al comienzo de la sesión, a las 10.00 horas, ocuparon sus escaños, que curiosamente se encuentran enfrentados. Diego se sienta en la bancada que ocupa el Grupo Popular, mientras que Buruaga, en calidad de vicepresidenta segunda de la Mesa, junto a Lola Gorostiaga. Al poco tiempo de que la presidenta de la Cámara diera el pistoletazo de salida a la tramitación parlamentaria, ambos se ausentaron del hemiciclo para centrarse en las tareas internas del partido.
También hicieron lo propio sus más allegados: Íñigo Fernández e Isabel Urrutia, líderes destacados en el equipo de Buruaga; y José Manuel Igual y Francisco Rodríguez Argüeso, que acompañaron durante unos minutos a Diego a tomar un café antes de que éste se dispersara en otras labores.
Precisamente, en la cafetería del Parlamento, Diego, ante la insistencia de los periodistas, apuntó que ya tiene recogidos los avales necesarios para formalizar su candidatura y destacó que cuenta “con el apoyo y el cariño de mucha gente del PP”. No pasó de ahí.
Nuevas alianzas
Los diputados del PP no han sido los únicos que han protagonizado entradas y salidas constantes de la sala -algunos más que otros-. Dado que las posiciones de los grupos ya son conocidas de antemano y que en la sesión de la mañana no se ha producido ninguna votación, el debate ha pasado casi sin pena ni gloria. Incluso, al comienzo el “runrún” era tan “insoportable” que, sin llegar a la primera hora, Gorostiaga ha tenido que intervenir para pedir a sus señorías que bajasen el tono de sus animadas conversaciones bilaterales.
Y eso pese a que es “un momento crucial” para la comunidad autónoma, tal y como se ha empeñado en recordar el portavoz regionalista, Pedro Hernando, quien ha destacado la importancia que tienen los presupuestos.
Lo que también ha quedado claro es que la tramitación del presupuesto de 2017, que asciende a 2.601 millones de euros, deja un nuevo panorama político, con Ciudadanos y Podemos recorriendo caminos inversos en dirección a los socios de Gobierno.