El Gobierno que preside Miguel Ángel Revilla ha cerrado este viernes un principio de acuerdo con Ciudadanos para que el diputado de la formación naranja apoye en el Parlamento autonómico las cuentas de 2019. A cambio, el partido de Albert Rivera verá como salen adelante las propuestas que había puesto sobre la mesa y que consisten en una rebaja fiscal “a la clase media trabajadora”, la racionalización del gasto en las empresas públicas y la tramitación de una ley de protección integral de denunciantes de corrupción.
Así lo han explicado los portavoces de los partidos que conforman el Gobierno, Pedro Hernando (Partido Regionalista) y Víctor Casal (PSOE), y el de Ciudadanos, Rubén Gómez, al concluir la reunión que han mantenido esta mañana, la tercera desde que se presentó el borrador del presupuesto, que asciende a 2.850 millones de euros, el más alto de la historia de la Comunidad.
Desde el inicio, Ciudadanos ha sido el socio preferente del Ejecutivo para lograr salvar su minoría en el Parlamento, donde necesitan el apoyo de al menos un diputado más. Y lo han conseguido. Tres reuniones oficiales les ha bastado para arrancar el 'sí' del partido naranja, que hace una semana puso negro sobre blanco sus condiciones. No obstante, el PSOE prefería haberse apoyado en Podemos, pero el partido morado está sumido en una profunda crisis interna que le mantiene desde hace más de un mes sin un interlocutor válido y más preocupado por una lucha de poder que por otras cuestiones.
En concreto, en el acuerdo presupuestario con Ciudadanos se ha aprobado la bonificación total del Impuesto de Sucesiones y Donaciones para los familiares de primer grado (cónyuges, descendientes y hermanos) y la creación de una nueva línea de ayudas para los autónomos que ganen menos del Salario Mínimo Interprofesional, a los que el Ejecutivo cántabro concederá 180 euros al año durante un tiempo máximo de cuatro ejercicios. Este programa estará dotado el próximo año con 5 millones de euros.
También en materia fiscal han acordado varias rebajas en el IRPF. Por un lado, las familias monoparentales se podrán deducir 200 euros siempre que no superen los 30.000 euros de ingresos anuales, y se ha aprobado una bonificación del 15% en gastos de guardería para familias con rentas de menos de 25.000 euros y otro 15% en gastos de Seguridad Social para los empleados del hogar, en ambos casos hasta un máximo de hasta 300 euros por hijo.
El diputado de Cs ha destacado que su partido ha logrado el objetivo que se había marcado en estas negociaciones y que no es otro que “aliviar el bolsillo” de los ciudadanos después de las subidas que se han aplicado en los últimos años. “Hemos logrado casi 40 millones de euros de bajada impositiva”, ha dicho satisfecho Rubén Gómez, para quien es “un buen acuerdo que va a beneficiar a los cántabros”.
En la misma línea se ha manifestado el portavoz regionalista, quien ha destacado que los presupuestos son una “herramienta fundamental para continuar la senda de crecimiento” y ha ensalzado que “Ciudadanos ha demostrado su voluntad de acuerdo cediendo en algunas cuestiones”. Por su parte, el socialista Víctor Casal ha subrayado que el documento elaborado por el Ejecutivo “consolida la tónica social” y ha adelantado que su partido no renuncia a recabar más apoyos, en alusión a Podemos.
Resto del acuerdo
Otro de los acuerdos implicará la tramitación de una nueva ley de protección integral de denunciantes de corrupción. El bipartito no se oponía a esta norma impulsada por Ciudadanos, pero prefería dejarla para la próxima legislatura ante el atasco que existe en estos momentos en el Parlamento, donde hay hasta una decena de iniciativas pendientes de aprobarse.
Además, se modificará la Ley de Caza a través de la Ley de Medidas Fiscales y Administrativas, con el fin de que “los ganaderos sean pagados en tiempo y forma por los daños que cause el lobo, que es uno de los principales problemas que tiene ahora el medio rural”.
Enmiendas a la totalidad
En cuanto al resto de formaciones, PP y Podemos han presentado sendas enmiendas a la totalidad, mientras que el diputado tránsfuga de Cs, Juan Ramón Carrancio, se abstendrá en la votación para, posteriormente, intentar pactar algunas enmiendas parciales.
La presidenta de la populares, María José Saénz de Buruaga, ha pedido al Gobierno la devolución de un presupuesto “malo para Cantabria, irreal en ingresos y gastos, que lastrará la economía productiva y que no es social a pesar de las soflamas, puesto que no garantiza una financiación adecuada de los servicios públicos esenciales”.
Igualmente, ha denunciado que la propuesta de negociación de socialistas y regionalistas “ha sido una mera escenificación y una farsa dentro de la farsa general que representa este presupuesto, puesto que la llamada al PP se produjo dieciséis días después de plantear la oferta, en el tiempo de descuento y con las negociaciones avanzada con otros grupos minoritarios”.
También Podemos ha registrado una enmienda a la totalidad al presupuesto, decidida a última hora, aunque el partido ha anunciado que la retirará si en las conversaciones que va a mantener durante el fin de semana con PRC y PSOE, los grupos que apoyan al Gobierno aceptan ocho propuestas que han planteado.
Así, entre otras medidas, los podemitas plantean que en el caso de que se abran diligencias en juzgados en cualquier caso en que haya investigado un alto cargo del Gobierno de Cantabria, el consejero responsable de su nombramiento debe dimitir o, si se abre investigación sobre un consejero, sea el presidente quien le cese automáticamente.
En materia de vivienda reclaman aprobar la Ley de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca antes de que finalice la legislatura y en Educación pública, exigen que no se incremente el presupuesto destinado a educación concertada y la subida que se contempla, se revierta en financiación de los centros públicos.
Independientemente de cómo transcurran las negociaciones con Podemos, con el 'sí de Ciudadanos ya garantizado, el Gobierno habrá logrado aprobar todos los presupuestos de la legislatura pese a no contar con mayoría en la Cámara.