El PRC de Miguel Ángel Revilla camina con paso firme hacia las elecciones autonómicas y municipales que se disputarán el próximo mes de mayo. La popularidad de un líder consolidado y un escenario propicio para convertirse por primera vez en su historia en la fuerza más votada dentro de la Comunidad Autónoma otorgan a los regionalistas un plus de confianza y motivación. Tanto es así que ya han comenzado a dar pinceladas sobre lo que puede ser el próximo Gobierno de Cantabria.
Aunque todavía restan algo más de seis meses para que los cántabros depositen el voto en las urnas y cada partido sepa las cartas con las que juega, aquel que quiera sentarse a negociar una coalición de gobierno con los regionalistas ya conoce algunas de las condiciones que estos pondrán sobre la mesa y que tienen que ver, principalmente, con el reparto de competencias.
En pleno conflicto sobre el calendario escolar, Revilla expresó públicamente su deseo de que los regionalistas asuman la gestión de Educación en la siguiente legislatura, en la que espera repetir como presidente autonómico. Durante la batalla abierta entre la Junta de Personal Docente y la Consejería que dirige el socialista Francisco Fernández Mañanes, el jefe del Ejecutivo ha jugado a medio camino entre respaldar al discutido consejero y hurgar en la herida, afirmando que él habría resuelto este conflicto de otra forma.
A esa pretensión, los regionalistas han sumado dos nuevas condiciones: devolver a la Consejería de Industria el control sobre Sodercan y que Turismo y Cultura vuelvan a estar situadas en el mismo área de gobierno por ser “binomios indisociables”. Así se recoge en sendas ponencias sobre infraestructura y políticas productivas que se defenderán el próximo 11 de noviembre en el XII Congreso del PRC ‘Cantabria gana’ y que han sido presentadas este lunes por el vicesecretario de Política Institucional, Francisco Javier López Marcano, y por el consejero de Obras Públicas y Vivienda y miembro del Comité Ejecutivo del PRC, José María Mazón, quiénes han estado acompañados por miembros de los equipos redactores.
Actualmente, la empresa pública responsable del desarrollo industrial de Cantabria está en manos de la vicepresidenta, Eva Díaz Tezanos. La exlíder de los socialistas cántabros aglutinó en torno a su figura una macroconsejería con cuatro áreas tan dispares como Medio Ambiente, Política Social, Universidades e Investigación, y además se puso al frente de Sodercan en un intento por ganar protagonismo mediático frente a una sombra tan alargada como es la del popular Miguel Ángel Revilla.
Aquella concesión no sentó nada bien al nuevo consejero de Industria -nombrado por el PRC-, Francisco Martín, que vio perder la que debía de ser una de sus principales herramientas de trabajo y una de las empresas públicas con mayor presupuesto. De hecho, hay quienes acusan a Martín de torpedear la gestión de Sodercan y de estar detrás de la campaña de hostigamiento de Podemos contra el entonces consejero delegado de la sociedad Salvador Blanco en un intento por propiciar la vuelta del ente público a la Consejería de Industria.
Pero no solo del reparto de competencias se ha habla estos días en las filas del PRC, sino también del regreso a la primera línea política de uno de sus dirigentes más carismáticos, Francisco Javier López Marcano. El exconsejero de Cultura y Turismo renunció a su acta de diputado para facilitar la investidura de Revilla con el apoyo de Podemos y tras salir absuelto del 'caso Racing' ha manifestado su intención de afrontar nuevas responsabilidades. Una aspiración que el secretario general de su partido ha bendecido y que el propio protagonista ha reiterado este lunes: “Soy un animal político y estaré donde mi partido quiera”, ha dicho a preguntas de los periodistas.
No obstante, aunque en el PRC dan por hecho la vuelta del que ha sido “el mejor consejero de Cultura y Turismo de la historia de Cantabria”, Marcano aún tiene abierta una causa judicial. Si bien la Audiencia de Cantabria ha archivado la actuación de las empresas públicas CEP Cantabria y CANTUR en la venta de acciones del Racing de Santander, todavía mantiene viva la investigación sobre el destino de las subvenciones concedidas al club al apreciar indicios delictivos de prevaricación, malversación o fraude.
Así, con la campaña electoral arrancando de forma oficiosa y con el PRC acariciando con la yema de los dedos una hipotética victoria, ya se dibuja en el horizonte parte de una de las cuestiones que más interés suele despertar: el reparto de las áreas de poder, retornando Sodercan a la Consejería de Industria, asumiendo los regionalistas por primera vez el área de Educación e integrando nuevamente Turismo y Cultura.
Reindustrialización e internalización
Además de estas cuestiones, el próximo Congreso del PRC abogará por la internacionalización del tejido empresarial, la reindustrialización de Cantabria , la reforma del Servicio Cántabro de Empleo, y por “mantener” su carácter reivindicativo en materia de infraesctructuras.
De este modo, Marcano ha subrayado la necesidad de que toda Cantabria sea declarada por el Estado Zona Específica de Reindustrialización y Fomento de la Competitividad Industrial, “con especial mención” a la Comarca del Besaya, y también de que se impulse internacionalización de las relaciones comerciales, industriales y turísticas, mediante la creación de una oficina en el exterior bajo la ‘Marca Cantabria’ para lo que habría que contar con el apoyo del Estado.
En este sentido, Marcano ha incidido en que “hay que aprovechar las fortalezas” que ofrecen el aeropuerto y el puerto y que “hay que mirar a un nuevo mercado, como es el africano”. En su ponencia, los regionalistas se muestran partidarios de “mantener” la política de suelo industrial y la apuesta por proyectos industriales como La Pasiega, Las Excavadas o las minas de zinc.