La privatización que ha realizado en los últimos años el Ayuntamiento de Santander de diferentes servicios públicos de competencia municipal sigue levantando ampollas y despertando las críticas de los vecinos y de los partidos de oposición por el deterioro que sufren a manos de las empresas adjudicatarias, a lo que se ha sumado en los últimos meses las incertidumbres sobre la gestión que se está realizando y el coste para las arcas públicas que tienen estos contratos millonarios.
Y es que al prolongado conflicto laboral entre los empleados de la contrata de Parques y Jardines, con un concurso público pendiente de resolución y una denuncia contra la adjudicataria, o a los desfases presupuestarios que se han detectado en las cuentas de la empresa que se encarga del servicio de aguas, con un incremento constante en las facturas que pagan los vecinos, se ha destapado ahora el polémico historial que atesora la responsable del servicio de limpieza viaria y de recogida de residuos sólidos urbanos, con más de una veintena de expedientes sancionadores abiertos por reiterados incumplimientos de contrato.
Así lo ha advertido este lunes el portavoz regionalista en el Ayuntamiento de Santander, José María Fuentes-Pila, que ha denunciado públicamente la existencia de un total de 21 expedientes de carácter penalizador contra empresa ASCAN-Geaser y emitidos por la responsable del contrato, la jefa del servicio de Medio Ambiente, con cinco de ellos en los que ya se han desestimado las alegaciones presentadas por la contrata.
La relación de expedientes de penalización iniciados versan, desde el incumplimiento de las condiciones del contrato respecto al mantenimiento del parque de papeleras o de los contenedores asociados a varias rutas, hasta la capacidad de vertido de los mismos, entre otros aspectos.
El grupo regionalista requirió dicha información tras conocer la relación de los expedientes abiertos y en tramitación a la empresa concesionaria de limpieza viaria y basuras, ante el “deficiente servicio manifiesto en los altos niveles de suciedad y abandono en las calles de la ciudad”.
“Santander cada vez está más sucia y la recogida de basuras se está prestando cada vez en peores condiciones. Si en un principio hablamos de las calles Castilla-Hermida, de los problemas de suciedad los fines de semana en la zona de Pombo y Cañadío, de la recogida neumática en la calle Alta, ahora no solo la suciedad está afectando al Santander de los barrios, sino también el Santander de postal, al de la primera línea”, ha denunciado Fuentes-Pila, que cuestiona la “permisividad” del equipo de Gobierno ante los “constantes incumplimientos” de un servicio que cuenta con 17 millones y medio de euros de presupuesto anual.
“Jamás el PP, antes en solitario y ahora en coalición con Ciudadanos, ha cumplido con sus funciones de fiscalización del cumplimiento de las condiciones del servicio. Ha mirado a otro lado sin preocuparse en garantizar que haya un buen servicio público. Es más, ya en 2015 permitió que quedase sin efecto la multa impuesta a la UTE Ascan-Geaser por valor de 151.074 euros por déficit de inversión en maquinaria y consecuentemente incumplimiento del contrato”, ha recordado.
A ello se suma la existencia la Fundación Leonardo Torres Quevedo, contratada por el Ayuntamiento para realizar el control externo de la calidad de este servicio y velar porque así sea. “Desde 2017 que se adjudicó este servicio, a razón de 112.473 euros anuales, lejos de unos resultados óptimos, el servicio cada vez es más penoso, por lo que dudamos de la labor que lleva a cabo dicha fundación”, ha dicho el concejal.
Fuentes-Pila ha sostenido que la “decisión política” de adjudicar el servicio en 2013 con un precio un 20% menor que el de la anterior concesión -159 millones de euros por 10 años- “ha afectado claramente al servicio y también a sus trabajadores”.
Para el edil del PRC, la deriva que está tomando este asunto podría derivar en que al lema de 'Santander, ciudad' se le añada la coletilla de “sucia”, “o tener que recibir a los turistas del ferry con un 'Welcome to Santander Dirty City”.
Control financiero
Hace apenas un mes, y en plena tormenta por la situación de la adjudicataria del servicio de Parques y Jardines, la alcaldesa de Santander, Gema Igual (PP), reconoció que la Intervención municipal también está realizando un informe de control financiero de Ascan-Geaser, al igual que tiene previsto hacer con Aqualia.
En aquel momento también admitió que la Intervención había abierto unos días antes un expediente a la empresa adjudicataria del Servicio de Parques y Jardines, la UTE Urbaser-Contratas Piñera, previo a las supuestas irregularidades detectadas desde 2012 a 2018 -periodo en el que ha recibido 48 millones de euros por este contrato-, que se comunicaron a la Alcaldía a finales de noviembre y que sigue pendiente de resolución.
La pasada legislatura, el concejal de Santander Sí Puede, Antonio Mantecón, llevó al Pleno municipal una moción en la que propuso recuperar la gestión pública directa del servicio de recogida de basuras y limpieza de la ciudad al considerar que “no se está prestando de acuerdo con las condiciones recogidas en el contrato”, una iniciativa que fue rechazada por la Corporación, a diferencia de lo que ocurrió en Torrelavega, donde acaba de llevarse a cabo este proceso de remunicipalización.