El festival Rock en la Feria clausuró este pasado domingo su tercera edición con los conciertos de Amaral, La Pegatina y las bandas cántabras Poetas de Botella y Maneras de Vivir, en una cita que ha contado en total con más de 10.000 espectadores a lo largo de las tres jornadas que han tenido lugar en el exterior de la Feria de Muestras de La Lechera en marco de las fiestas de la Virgen Grande de Torrelavega.
El festival, que se ha celebrado entre el 11 y el 13 de agosto en la capital del Besaya, sigue dando pasos para buscar su consolidación en el panorama musical del norte de España y ha contado este año con las actuaciones de grupos de referencia dentro del rock nacional como El Drogas, Sínkope, Barón Rojo o Warcry, entre otros.
En esta tercera edición han pasado por los escenarios de Rock en la Feria un total de 14 bandas o artistas, proporcionando cerca de 18 horas de música en directo, el récord hasta la fecha en la trayectoria del festival, que por primera vez ha incluido dos escenarios y una zona de food trucks para aumentar la oferta gastronómica disponible para los asistentes al evento.
La organización trabaja ya en la cuarta edición, que se celebrará el próximo año entre el 10 y el 12 de agosto en Torrelavega, en un festival que volverá a apostar por ofrecer a precios asequibles lo mejor del panorama musical español al tiempo que se proporciona a las bandas cántabras emergentes una posibilidad de darse a conocer ante una gran audiencia.
De los más de 10.000 espectadores que han acudido a esta última edición de Rock en la Feria, más de 4.500 asistieron a los conciertos protagonizados por Amaral y La Pegatina en la jornada del domingo, mientras que el sábado hubo más de 3.100 personas para ver a Barón Rojo y Warcry, y cerca de 2.600 presenciaron el viernes las actuaciones de El Drogas y Sínkope.
Además, por tercer año consecutivo, Rock en la Feria ha contado con un servicio de transporte específico para los asistentes con el objetivo de atraer hasta Torrelavega al público de otras localidades de Cantabria y que todos ellos puedan acudir con seguridad, sin preocuparse por el tráfico o el aparcamiento.
Al impacto económico para la ciudad que suponen estas cifras de asistentes, en la organización de Rock en la Feria 2017 han trabajado un total de 110 personas de manera directa, encargadas de que todos los detalles del festival estuvieran preparados para recibir al público durante los conciertos, a lo que se suman otros 140 empleos indirectos relacionados con la seguridad, el montaje o la atención sanitaria, entre otras tareas.
El festival, que concluyó su tercera edición este pasado domingo, cuenta con el apoyo de instituciones como el Ayuntamiento de Torrelavega o el Gobierno de Cantabria y el patrocinio de empresas privadas como Viesgo, Parte Automóviles, ALSA, Amstel, Ballantine's o Gallofa&Co y está organizado por MG Producciones y Mouro Producciones.