Sobrecarga, demoras en las citas y patologías sin asistencia: la pandemia acentúa las carencias de la Atención Primaria por falta de personal

Rubén Alonso

16 de agosto de 2020 19:59 h

0

El funcionamiento del Servicio de Atención Primaria de Cantabria está siendo uno de los focos de críticas sociales y políticas durante estos últimos meses en los que la COVID-19 había dado un pequeño respiro. Y es que la pandemia, que por los datos de las últimas semanas parece que vuelve a golpear con fuerza, ha acentuado las carencias de este servicio que, por falta de personal, se encuentra con una sobrecarga de trabajo que genera largas listas de espera y demoras en las citas, así como algunas patologías sin asistencia médica.

Según explica un trabajador del Centro de Salud Dávila de Santander, mientras que otros años no estaba permitido que faltase más del 33% de la plantilla en época de vacaciones, durante este julio y agosto lo han hecho más de la mitad de los médicos, sin contar con sustitutos para cubrir esos puestos. A ello hay que sumar que, con motivo de la crisis sanitaria, se ha reducido el número de citas y la mayoría se llevan a cabo de forma telefónica, por lo que la espera para recibir atención médica puede llegar hasta los siete días.

Según detalla este profesional sanitario en conversación con elDiario.es, el método que se está llevando a cabo para tratar de cubrir las necesidades de personal es el de 'absorción de demanda', que consiste en que los médicos que trabajan por la mañana y no pueden hacer frente al volumen de trabajo, amplían en dos horas su jornada laboral por la tarde cobrando un extra de 200 euros. Además, también se lleva a cabo el conocido como 'reparto de autocobertura', que consiste en que el trabajo de cada médico que falta se divide entre los que están en activo, así como su salario.

“El problema de fondo es que no hay médicos”, subraya este sanitario, hasta el punto de que durante la pandemia “se han suspendido los programas de control de diabetes y enfermedades crónicas y pluripatológicas”. “Es inexplicable que se les permita a todos coger vacaciones sin cubrir las plazas porque salimos de una situación en la que no se ha estado atendiendo a la gente”, sentencia.

Otro de los problemas relacionados con la falta de recursos en la Atención Primaria radica en las ambulancias. Concretamente, la adjudicataria del servicio en la comunidad, la empresa Ambuibérica, que cuenta con varios litigios en los tribunales relativos a las condiciones laborales de sus trabajadores, tampoco sustituye al personal que se encuentra de baja, bien por COVID, bien por cualquier otro motivo.

Así lo explica Paulino González Revuelta, trabajador del Soporte Vital Avanzado de Laredo, quien pone sobre la mesa, en conversación con este medio, las dificultades que tienen para cubrir el servicio en condiciones y con garantías de seguridad, tanto para ellos, como para los propios usuarios.

Como ejemplo de ello, relata que hace unos días, la ambulancia que cubre la zona de Sarón fue a recoger un paciente que posteriormente resultó ser positivo en coronavirus. “A los dos técnicos de emergencias que estaban dando el servicio se les envió a casa en aislamiento y esa ambulancia se tuvo que inutilizar hasta el siguiente turno, varias horas más tarde”, explica.

Así pues, se quedó sin servicio una zona muy amplia porque “la empresa no cuenta con suficientes trabajadores para sustituir” y fueron las ambulancias de Santander, con su ya de por sí carga de trabajo, las que tuvieron que asumir esa tarea. “Esta situación nos parece muy grave”, subraya, porque “los afectados son los ciudadanos”.

A ello, además, hay que sumar la polémica en torno a los turnos de trabajo que denunció recientemente CCOO y sobre lo que este trabajador también se queja. “El Servicio Cántabro de Salud recomienda turnos de 12 horas con tres días de descanso y la empresa quiere que hagamos de ocho”, lamenta.

Reacciones políticas

La situación de la Atención Primaria en Cantabria ha trascendido en los últimos días al plano político, con reacciones por parte de partidos de la oposición, como PP, Vox e IU, reclamando al Gobierno autonómico medidas para revertir los problemas citados anteriormente. El PP habló de “desbordamiento generalizado” y criticó “la inacción y falta de soluciones” del Ejecutivo, Vox denunció el “colapso” y criticó la pasividad del Servicio Cántabro de Salud (SCS), e IU se hizo eco de “numerosas quejas” ante un escenario “insostenible”.

Por otro lado, la Unión de Consumidores también ha manifestado recientemente su “preocupación” por la “saturación” de los centros de salud de Cantabria. “Es una situación que afecta no solo a los propios facultativos, sino al resto de personal sanitario, laboral y administrativo que presta su encomiable labor en dichos centros a veces en condiciones precarias desde el punto de vista contractual”, afirmó en un comunicado.