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La agricultura intensiva y el trazado de carreteras convierten a la región en una 'zona crítica' para la fauna

La presencia de grandes carreteras permiten la conexión entre municipios pero, a su vez, fragmentan el territorio y dificultan la movilidad de las especies animales. Ejemplos evidentes en Castilla-La Mancha son los atropellos en carretera que, a día de hoy, son la primera causa de mortalidad del lince ibérico, con 121 atropellos en los últimos 10 años.

Es uno de los datos que recoge el informe 'Autopistas Salvajes' realizado por WWF, organización de conservación de la naturaleza, que establece la relación entre el desarrollo de urbanizaciones, la agricultura intensiva y la existencia de carreteras con la pérdida de corredores naturales que conectan los espacios entre los que se desplaza la fauna de todo el país.

En el informe se identifican los 12 corredores ecológicos prioritarios por los que se mueve la fauna por la Península Ibérica, en concreto mamíferos forestales, así como los puntos críticos dentro de estos corredores que urge restaurar para reconectar nuestra naturaleza. Parte de estos doce corredores pasa por la región. “En la provincia de Albacete y en Castilla-La Mancha en general hay bastante concentración de corredores ecológicos prioritarios”, explica Gema Rodríguez, autora del texto.

Un ejemplo de ese cruce de caminos que supone la provincia de Albacete para los corredores ecológicos, por donde transitan las especies, es el Corredor de la Sierra Bética “que va por todo el sur de España y entra de lleno en la provincia”, continúa Rodríguez. A éste se une el Corredor de La Mancha. En el resto de la región se apunta también al Corredor Ibérico, “que une Castilla-La Mancha con el norte de España”, el del Sistema Central, para finalizar con el Corredor de Sierra Morena y Montes de Toledo.

Castilla-La Mancha es lugar de paso para especies como el lince ibérico. Pero la realidad es que también es una de las regiones donde la mano del hombre ha cortado el paso de esos corredores. Son lo que el informe ha llamado 'Zonas Críticas'. Hay 17 en toda la Península Ibérica y, al menos, cuatro pasan por esta Comunidad Autónoma. “Uno de estos puntos críticos atraviesa Albacete, concretamente en La Mancha Oriental”, cuenta la autora del informe que asegura que esta zona, la de La Mancha Oriental, tiene “un 60% de cultivos. Es un uso mayoritario, el que más contribuye a disminuir la conectividad”.

Pero no es la única zona crítica de la región: la zona norte de Guadalajara y el norte de Toledo también aparecen en color rojo en el mapa donde se trazan los puntos que contribuyen a romper las “autopistas salvajes” por las que se mueven las especies. “Muchas están en zonas de importancia para el lince”, advierte Gema Rodríguez.

Pérdida de especies

“Si deciden no poner medidas -dice Rodríguez- lo que pasará es que continuará el proceso de destrucción de hábitat. Se seguirá ordenando el territorio sin ningún tipo de planificación ni coherencia”, lo que provocará que los espacios naturales no estén conectados entre sí, impidiendo el movimiento de las especies. “Eso llevará a la desaparición de poblaciones y extinción de las especies”, advierte la autora del informe y miembro de WWF España.

Lo bueno es que el país en general tiene “buenos mimbres” para tener un territorio conectado: los espacios naturales protegidos ocupan casi la tercera parte del territorio(espacios Red Natura 2000 ocupan el 27% del territorio).

Propuestas de WWF para las comunidades autónomas

Con toda la información y el mapa de corredores ecológicos y zonas críticas ya establecido, WWF propone a las distintas comunidades autónomas “integrar la presente red de conectividad en los diferentes instrumentos de planificación regional”.

Entre ellos, las directrices regionales de ordenación del territorio de las comunidades autónomas (también conocidas como Planes de Ordenación Integral del Territorio) que sirven de base para los contenidos de los planes territoriales sectoriales autonómicos, los planes de ordenación integral del territorio a escala subregional o comarcal, y el planeamiento municipal.

Además proponen que los procesos de evaluación ambiental estratégica de planes territoriales y sectoriales autonómicos se hagan tomando dicha red de conectividad como cartografía de referencia para integrar en la ordenación del territorio.